Ha habido un “resurgimiento drástico” de sarampión en Europa, en parte provocado por el rechazo a las vacunas, con casi 90 mil personas enfermas por el virus en el primer semestre de 2019, informó la Organización Mundial de la Salud.
El número de casos de sarampión entre enero y junio se duplicó comparado con el mismo periodo del 2018, informó la agencia de salud de la ONU en un reporte publicado el jueves. El sarampión es una de las enfermedades más infecciosas del mundo y se propaga principalmente al toser, estornudar y contacto físico cercano.
Aunque varios países europeos han implementado políticas severas de vacunación, los grupos que se oponen a las vacunas han provocado epidemias en el continente. El mes pasado, el gobierno alemán propuso hacer que la inmunización para sarampión fuera obligatoria para niños y empleados en kínderes y escuelas; se han reportado más de 400 casos de sarampión en Alemania en este año.
Con más de 84 mil, Ucrania representa la mayoría de casos en Europa, seguida por Kazajistán y Georgia. En febrero, el ministerio de salud de Ucrania dijo que ocho personas habían muerto de sarampión.
Un comité de expertos de la OMS dijo que cuatro países –Albania, República Checa, Grecia y el Reino Unido– perdieron su estatus como libres de sarampión. Se puede evitar la enfermedad con dos dosis de la vacuna, pero no hay tratamiento efectivo una vez que las personas ya están infectadas.
“Si no se logra y mantiene una elevada cobertura de inmunización en todas las comunidades, tanto niños como adultos sufrirán innecesariamente y algunos morirán trágicamente”, dijo el médico Guenter Pfaff, presidente del comité experto en sarampión de la OMS en Europa.
En algunos países desarrollados, las tasas de vacunación contra el sarampión se han desplomado tras la publicación de un estudio erróneo publicado a finales de los 1990 que vinculó las vacunas del sarampión, paperas y rubeola con el autismo. Desde entonces, autoridades de salud han batallado para desmentir la información equivocada.
“La desinformación sobre las vacunas es tan contagiosa y peligrosa como las enfermedades que ayuda a propagar”, dijo en un comunicado esta semana el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
En 2017, OMS calculó que unas 110 mil personas murieron por sarampión a nivel mundial, la mayoría niños menores a 5 años.
La Jornada.