…Fuerte y justificada preocupación se gesta en la sociedad mexicana. El rumor de una nueva “Ley del Impuesto a la Plusvalía de Bienes Inmuebles”, habría sido autorizada (a escondidas), por el congreso federal.
Ya existe un impuesto (ISAI) que nos grava la venta sobre la compra, esto es, un impuesto al valor que obtuvo nuestra propiedad en el lapso entre que la heredamos, o adquirimos, y cuando la vendemos. Ahora, la amenaza es doble. Si el gobierno quiere afectar, aún más, a la agraviada sociedad mexicana, este es un buen camino. La plusvalía no siempre es ganancia (legitima, por cierto), muchas ocasiones es simplemente la diferencia entre la depreciación del bien y la oferta de mercado (el mercado nacional, es recesivo).
¿Tantos mexicanos que solo tenemos una propiedad, pagaremos un impuesto por nuestra casa (ese único bien que fuimos pagando con esfuerzo de tantos años de labor, quitándole a otros benefactores familiares), esa propiedad, que seguramente será patrimonio de nuestros hijos?
Es falso que la plusvalía sea solo consecuencia lógica de los servicios y el equipamiento urbano que el gobierno realiza. Son multifactoriales los efectos sobre el valor de una propiedad y tiene más que ver con los fraccionamientos o grandes tiendas ancla que se construyen (por el sector privado), cerca de nuestros terrenos o fincas. Un desarrollo urbanístico atrae los servicios y el equipamiento.
Consultando el tema.Haciendo algunas consultas nos indican que es en la CDdeMx donde fue autorizada o está en proceso, esta aviesa ley, pero que el efecto de contagio ya sube al congreso y que es posible que el daño sea general. Mancera Aguayo sacrifica la única ganancia leal de la sociedad y pretende convencer a Enrique Peña Nieto “de las bondades de su monstruo legislativo”. ¿Qué partidos políticos la promueven y cuales no?, es esta una información relevante.
Mancera dice que no pasará la ley, pero lo dice en los medios, luego filtra que es MORENA quien la promueve… y no él.
En Coahuila, para pena y desgloria nuestra, existe una ley similar que viene desde el sexenio de don Oscar Flores Tapia. Una ley que por fortuna no se conoce y no se aplica; pero que al existir, significa una amenaza legislativa, (una más alas tantas que se impusieron por este Moreirato indolente y gandalla).
¡Ideotas de políticos, o políticos ideotas!… ´pal caso.