El domingo pasado nuestro periódico nos obsequió uno de sus aciertos informativos haciendo gala de la imparcialidad, la publicación de, ¿POR QUÉ SÍ O POR QUÉ NO? mostró a los lectores la opinión de 24 editorialistas de este diario que presentamos las razones por las cuales participar o no en la revocación de mandato del próximo domingo.
El controvertido ejercicio de la revocación ha sido objeto de sesudos debates, deliberaciones y disputas que desde mi punto de vista son sanos, significan intercambios que ilustran a la ciudadanía, además ayudan a esclarecer las conveniencias, los perjuicios o improcedencias de ese proceso puesto en marcha a regañadientes por el INE responsable de su aplicación, con la recolección de firmas de ciudadanos durante el 1 de noviembre al 15 de diciembre de 2021 para determinar su procedencia o no.
En la pregunta al SÍ o al NO predominó el segundo, 20 opinadores respondieron que NO irán a votar por no estar de acuerdo con ese ejercicio de revocación o que participaran y votarán para botar a AMLO porque es demagogo y populistas, sólo 4 votamos en positivo, expresamos un SÍ para que AMLO continúe su mandato de 6 años de ejercicio en la presidencia de la República; en algunos de los opinadores se asoma el odio hacia el Presidente, odio que ya se ha vuelto pandémico en destacadas personalidades, vaya manera de envenenar sus emociones, no vale la pena odiar a nadie, por equivocado que pueda estar, es su cuento, aunque a los servidores públicos hay que señalarles sus desaciertos, eso sí.
Resulta curioso, nadie manifiesta detestar al expresidente Calderón que desató una guerra que ha teñido de sangre al país o porque no hizo justicia en el caso de la guardería en la que murieron incinerados decenas de bebés y otras tantas e innumerables omisiones o acciones perpetradas por su sucesor Peña Nieto, como la “verdad histórica” sobre los 43 jóvenes guerrerenses desaparecidos o el error de diciembre de 1994 de Ernesto Zedillo que causó la devaluación del peso mexicano, fuga de capitales, falta de liquidez y un aumento inconcebible de la deuda del país que aún pagamos los mexicanos y él tan feliz disfrutando de su vida, la enumeración no tendría fin en los 93 años de gobiernos del prian.
Algunos opinadores pierden de vista que la revocación de mandato no es sólo para este presidente o lo ocultan por otros intereses y como bien lo expresa Luferni en la página citada, “Parece sabio y conveniente que se dé a la ciudadanía la posibilidad de no soportar un mal gobierno y que pueda suspenderlo con una votación mayoritaria” …
Celebro que VANGUARDIA haya publicado ayer la “suavización” del pronunciamiento del gobernador de Coahuila en contra de acudir a votar en próximo domingo, aunque si se analiza con cuidado hay una justificación que no alcanza a ser tal, era fin de semana dice, ¿será que toma semana inglesa en su cargo? Al intentar quedar bien se echó la soga al cuello, es que Coahuila no tiene gobernador los sábados y domingos, vaya razonamiento retorcido.
De lo que estoy segura es que la historia no olvidará y quizá hasta les cobre a quienes han intentado inmovilizar el voto en la revocación del próximo domingo, quedarán como antidemocráticos ante quienes estamos de acuerdo y complacidos de avanzar y profundizar en la democracia de nuestro país y así avanzar en el impulso de la 4T.