De acuerdo con la investigación que hizo el medio Latinus, hay presuntos lazos entre Andrés López Beltrán y el empresario Jorge Amílcar Olán Aparicio, quien habría obtenido contratos por parte del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) en Quintana Roo y Tabasco.
Y es que según este reportaje, Beltrán estaría implicado en un esquema de negociaciones relacionadas con asignaciones de contratos a la empresa Romedic, propiedad de Olán.
En diciembre del 2022, Romedic fue beneficiada con un acuerdo por 304 millones de pesos para proporcionar medicamentos y suministros médicos al gobierno de Quintana Roo. Esta compañía, fundada en enero de 2020 en Villahermosa, Tabasco, está vinculada a Jorge Amílcar Olán.
Las investigaciones resaltaron que existe un contrato que formaría parte de un arreglo, que incluiría fondos adicionales de hasta 500 millones de pesos para 2023, acordados con funcionarios del estado gobernado por Mara Lezama.
Detalles adicionales del reporte señalan que la relación entre las partes habría facilitado la adjudicación preferencial de contratos, planteando inquietudes sobre la transparencia en los procesos de licitación y asignación de recursos públicos en el sector salud. El impacto financiero de estos contratos y las implicaciones políticas están bajo escrutinio, pues involucraría a figuras públicas y la gestión de fondos en dos importantes estados mexicanos.
La denuncia y las subsiguientes investigaciones se mantienen en desarrollo, con la expectativa de posibles consecuencias administrativas o legales si se corroboran las alegaciones. Este caso pone de manifiesto la importancia de la vigilancia y la rendición de cuentas en la administración pública, particularmente en la gestión de la salud pública en medio de desafíos continuos por la pandemia y demandas del sector.