Último intento de que el poder económico entre a la arena electoral. Visita apresurada.
Alejandro Moreno Cárdenas tendrá su primer encuentro con los principales hombres de negocios de Nuevo León. El dirigente nacional del PRI llegará a esa reunión con el pedido de que el poder económico elija un candidato ciudadano que pueda encabezar una alianza PAN-PRI-PRD en Nuevo León.
Alito será enfático en su mensaje: sin esa fórmula entre los partidos estructurales y un candidato del empresariado, será casi imposible vencer a Clara Luz Flores, a quien el dirigente tricolor ya da por descontado será la candidata de Morena en Nuevo León.
Será la última chance del empresariado regiomontano de proponer un perfil ciudadano para las elecciones. Todos los intentos anteriores han fracasado. Fernando Canales les ofreció en múltiples oportunidades la candidatura del PAN que estos rechazaron porque decían que eso los confrontaba con el Gobierno y que ellos debían proteger sus empresas.
Ildefonso Guajardo permanece como una opción sobre la mesa, aunque su nivel de conocimientos apenas ha remontado. Además, el ex secretario de Economía no ha querido renunciar al PRI, lo cual sería una condición necesaria para la idea de “ciudadano”.
La llegada de Moreno Cárdenas al círculo del poder económico regiomontano parece tardía y poco organizada. La realidad es que varios de los interlocutores que lo esperan ya están satisfechos con la posibilidad de que Clara Luz Flores sea gobernadora. Ven en la alcaldesa un canal de negociación con Palacio Nacional y no desean un gobernador de marcado perfil opositor porque eso perjudica las finanzas estatales.
De prosperar el plan que lleva el dirigente del PRI, habrá que acoplar otros movimientos. Desactivar la candidatura de Adrián De la Garza, dejar fuera de la carrera al senador Víctor Fuentes y, lo más difícil, instalar un candidato ciudadano que deberá competir, probablemente, contra clara Luz y Luis Donaldo Colosio, políticos con picos de popularidad.
Giro: Mauricio rechazó la candidatura del frente PRI-PAN-PRD y van por Colosio
Esfuerzo decisivo para convencer al diputado de que salga de MC. El rechazo del ex alcalde.
Alejandro Moreno Cárdenas se retiró anoche a altas horas de la madrugada con cierta desazón de la residencia de Mauricio Fernández Garza. El panista y ex alcalde sampetrino rechazó ser el candidato a gobernador de Nuevo León de la alianza PAN-PRI-PRD. El dirigente nacional del PRI estaba convencido de que era una fórmula ganadora. Un ex alcalde de peso, con fuerte respaldo empresario y muy competitivo frente a Clara Luz Flores.
Fernández dijo que la situación financiera del estado es muy mala y que no tiene sentido gobernar la entidad en esas condiciones, especialmente con el desdén del Gobierno Federal en manos de Morena.
Le dijo a Alito también que su foco es San Pedro Garza García porque su proyecto central es evitar un nuevo mandato de Miguel Treviño en el municipio.
Con este panorama, el PRI y el PAN ahora miran hacia Luis Donaldo Colosio. La relación del diputado local con Dante Delgado está dañada por la negativa del dirigente nacional a aceptar alianzas con el PAN. La idea de que Colosio sea el candidato de la alianza tiene el visto bueno de dos actores protagónicos de estas negociaciones: Francisco Cienfuegos y Zeferino Salgado.
Así las cosas, Colosio podría ser el abanderado del PRI-PAN-PRD y Samuel García terminaría como el candidato de MC a la gubernatura.
La jugada de lanzar a Colosio tiene adeptos en el poder económico, agrada a los gobernadores Jaime Rodríguez Calderón y Enrique Alfaro, y funciona entre los liderazgos locales del PRI y del PAN.
La Política Online