Un demagogo incompetente que se preocupa más por elaborar manipulantes discursos huecos y sin sentido consolidando el más sucio y corrupto poder político que involucrarse por diseñar e implementar políticas que puedan abordar de manera significativa y subsanar los problemas a largo plazo para su país y sus como el les denomina a sus “mascotas”_
López Obrador demuestra ser un embaucador sin un plan, un charlatán torpe que se destaca por ampliar e incluso crear los peores problemas a México, no ha logrado reunir siquiera un equipo de asesores no corruptos o capaces de atender las problemáticas para crear reformas significativas
Por terquedad e ineptitud, no responde a la emergencia mundial y decenas de miles de mexicanos pagan con su bienestar y vidas en tanto sumerge a su país bajo delincuenciales mafias por la desigualdad y pobreza que él mismo ha cultivado con tal de estar en el poder y ser el centro del espectáculo.
Los inversionistas extranjeros entusiasmados con el lanzamiento del nuevo acuerdo comercial entre Estados Unidos, México y Canadá (USMCA) deben comprender los riesgos potenciales asociados con la apertura de nuevos proyectos en México en este momento. El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, es ampliamente reconocido por los analistas de políticas y los asesores de inversiones como un demagogo incompetente que se preocupa más por redactar discursos y consolidar el poder político que por diseñar e implementar políticas que puedan abordar de manera significativa los problemas de larga data de su país. Durante 2019, en su primer año completo en el cargo, López Obrador priorizó la realización de teatro político y prometió al público que construiría proyectos multimillonarios para mascotas. Se promociona a sí mismo como un líder transformador, pero hasta ahora sus iniciativas de mayor prioridad son una nueva refinería de petróleo en su estado natal y un polémico tren a diesel que llevaría a los turistas a través de algunos de los ecosistemas más prístinos y delicados de México. ¿Mejorando la seguridad? ¿Reinando en monopolios? ¿Luchando por una reforma fiscal progresiva? ¿Trabaja para ayudar a que evolucione la creciente economía informal de México? Todas estas son tareas difíciles pero esenciales que López Obrador ha eludido.
En lugar de liderar a México, simplemente continúa haciendo campaña.
Forbes