El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, se reunirán el 5 de octubre en Ciudad de México durante la visita que realiza el funcionario estadounidense para copresidir el Diálogo de Alto Nivel sobre Seguridad entre Estados Unidos y México 2023.
El secretario de Seguridad de EE.UU., Alejandro Mayorkas, y el secretario de Justicia, Merrick Garland, acompañarán a Blinken, así como el secretario adjunto para Asuntos del Hemisferio Occidental, Brian A. Nichols, y el subsecretario adjunto para Asuntos Internacionales de Narcóticos y Aplicación de la Ley , Todd D. Robinson, quienes conversarán con sus pares del gobierno mexicano.
El encuentro entre las delegaciones surge en medio de las reiteradas críticas de López Obrador sobre el manejo del gobierno estadounidense de la crisis de tráfico y consumo de fentanilo porque –según el presidente– los legisladores estadounidenses “nada más le echan la culpa a México, sin ninguna razón”.
“A través de este diálogo, Estados Unidos y México discutirán la implementación conjunta del Marco del Bicentenario entre Estados Unidos y México para la seguridad, la salud pública y las comunidades seguras”, detalla el comunicado del Departamento de Estado de EE.UU.
La discusión sobre seguridad surge a su vez en medio de que Estados Unidos pide la captura y extradición del resto de los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán, apodados “Chapitos”, luego de que se extraditara a Ovidio, uno de los hijos.
Así mismo, López Obrador ha insistido en que el gobierno estadounidense debería enviar más apoyo económico a países latinoamericanos para atacar la crisis migratoria desde su origen, y ha descrito como “muy hipócrita esa política antimigrantes”, aunque reconoce que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, “ha avanzado bastante en entregar estas visas de trabajo a migrantes”.
El Diálogo de Alto Nivel sobre Seguridad presenta, según el Departamento de Estado, la oportunidad de discutir el incremento de inversión en instituciones del sector de justicia y seguridad para reducir la impunidad por crímenes de alto impacto, incluidos aquellos contra estadounidenses que viven o viajan a México.