Años duros le esperan a Coahuila.

Se ha validado el fraude electoral. Miguel Riquelme: sin fuerza moral (ni ética ni principios), incluso sin voluntad propia, nos mal gobernará por 6 largos años.

Nuestra amada tierra ha recibido un nuevo golpe, uno terrible. El voto popular fue despreciado, la justicia (infectada) ha enseñado su verdadera cara. Las instituciones nacionales, una vez mas se han entregado, desprestigiadas, al poder corrupto.

5 largos meses de burlarse de un elector, de fingir democracia y justicia; para que, al final, un Tribunal manoseado, practique un teatro barato y burdo.

¿Qué esperar con Riquelme en la gubernatura?

Un gobernante tibio y desprestigiado.

Compromisos que atan (al paso de los meses, aun siendo de los coludidos, irá viviendo la realidad espantosa del estado de las cosas en el gobierno). Un gabinete parchado (cuidadores del retroceso, parchado de emisarios del pasado reciente; de este que aún resuena en nuestros violados oídos). Planes hechos por otros que debe decir como suyos. Carga anímica y carga política.

Ingobernabilidad por el desprecio social al gobierno espurio, por la impotencia ciudadana vuelta coraje. Por un repudio a la persona, a la investidura incluso, y al fondo que representan.

Complacencia ante todo el daño hecho. Más corrupción para solapar la corrompida trayectoria del moreirato. Cuesta arriba en todo desafío financiero, nulas obras y mayor abandono a los desprotegidos. Sin dinero, con MegaDeuda ocultada en sus alcances reales, participaciones federales comprometidas para servir la deuda, castigo de endeudamiento por todo 2018.

Elecciones locales y federales en puerta, gasto mayúsculo y “nuevo fraude”. La nómina obesa del gobierno, la doble de los negocios de los aviadores y la nómina enorme del voto duro del PRI (cargada a la quebrada tesorería estatal).

El crimen está de fiesta. Uno de los suyos hereda a su ahijado y nada cambia.

El gabinete de los malos.

Toda esa pléyade de “políticos” desbordados en los negocios del moreirato, todos esos corruptos, son el bagaje útil del artificio apellidado Riquelme.

Solo unos pocos nombres, de tantos que hay: Chema Fraustro Siller (el manoseador millonario), Marucha Monsiváis Guajardo (LadyCobijas), David Aguillón Rosales (el espía), Ismael Ramos Flores (Limpia Cloacas), Homero Ramos Gloria (el enlace), Víctor Zamora Rodríguez (el capo). Tela de donde pegar.

Hay que agregar los mafiosos de la alcaldía de Torreón, que forman el equipo de enriquecimiento inexplicable y negocios sucios de Miguel Riquelme: Morán, Berlanga, Villarreal, Martínez, etc. Todos al gabinete del “desfalco y el crimen III”.

Olvidamos decir que: Valeriano Valdés Cabello se ha ganado la presidencia del Honorable Tribunal Superior de Justicia y Gabriela De León Farías sin duda debe ser la Fiscal General del Estado. “Pulcros personajes” para tan cándidos cargos.

Cambio de fondo.

Nos quedó claro que Enrique Peña Nieto, en su raciocinio desquiciado, cuando leyó (le leyeron) las denuncias de la Universidad de Texas, el COLMEX y la Iberoamericana, entendió que era propaganda criminal desde el gobierno y no el horror hecho denuncia. Entonces decidió apoyar la corrupción que los enriquece y dar la espalda a los coahuilenses. Validó el fraude (a Moreira y a Riquelme).

En un poco más de seis meses hay elecciones y en un año hay nuevo presidente. Aprendida la lección y sabiendo como roban (hasta votos), el cambio debe darse desde el fondo elector. Contundente para evitar empates o gandallismos.

Barrer los escalones de arriba hacia abajo. Es la idea. ¡Votando y denunciando! A ver quién se cansa primero. A ver si al cambiar, llega la justicia esperada.

Historia de familias (secretos).

Hay tanta información que ir divulgando de cómo se enriquecieron Los Moreira, sus gabinetes, socios y tapaderas.

La riqueza Moreira (uno por uno). Los ranchos y propiedades de Chema (y sus amigos extraños), la nueva casa, propiedades y asociaciones de Aguillón y Marucha, los ranchos y entierros de Zamora, el dinero oscuro de Ramos Gloria, las sociedad de Ismael y Chuy y etc.

La corrupción tiene nombre y apellido, le iremos poniendo los rostros… y los datos.

ColumnasdeMexico.com
“Con ética y honestidad: Otra historia se escribe. Otro México se cuenta”.

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