No hemos visto ni el final del principio. Florestán Cuando la mayoría de los empresarios que critican al presidente Andrés Manuel López Obrador lo aplaudían el lunes por la mañana en Palacio Nacional al convocarlos a invertir para crecer a 4 por ciento este año, no entendieron que les había endosado esa responsabilidad y que de no llegar a esa cifra, como no se llegará ni a la mitad, será su responsabilidad.
A esto agrego lo que publicó el vicegobernador del Banco de México, Gerardo Esquivel: “La desaceleración económica parece ser más generalizada de lo que algunos creen. En diciembre de 2018, la actividad industrial en Europa cayó a una tasa anual no vista desde hace una década. Lo mismo ocurrió en México.”
Consultado otro especialista, dijo: “Esquivel tiene algo de razón, pero dada la dependencia con Estados Unidos, que no se ha desacelerado, caer igual que Europa es una mala noticia.”
¿Qué quiere decir la suma del planteamiento del Presidente a los empresarios de invertir para crecer este año a 4 por ciento, cuando los indicadores nos ponen por debajo de 2 por ciento y la afirmación de Esquivel que de darse es desaceleración, como se dará, será un asunto del exterior?
Pues que el decrecimiento de este año será responsabilidad de los empresarios, que no invirtieron y de la caída de la economía internacional.
Y le doy estos datos: en los últimos cuatro sexenios, de acuerdo con el Inegi, el crecimiento promedio de la inversión bruta de capital fue de un triste 1.8 por ciento, lo que no se alcanzará este año.
Así, pues, será imposible, no diga usted crecer a 4 por ciento, como le celebraron los inversionistas el lunes por la mañana, ni siquiera al 2. Pero ya hay responsables: esos empresarios que le aplaudieron en el salón Tesorería y los factores externos de volatilidad.
Sus decisiones de gobierno, no.
RETALES
1. SOBORNOS.
La próxima semana se activará el caso Odebrecht y la Fiscalía General de la República procederá contra el ex director de Pemex, Emilio Lozoya, acusado de haber recibido y depositado en cuentas en el extranjero, lo que operadores de esa trasnacional confesaron haberle entregado:
2. CORTE.
El presidente de la Suprema Corte, Arturo Zaldívar, me dijo ayer que el presidente López Obrador no ha intervenido para nada en la vida interna del Poder Judicial y que hay quienes los quiere enfrentar. Que la Corte es el fiel de la balanza como lo demuestra el fallo que suspende la aplicación de la Ley Federal de Remuneraciones de los Servidores Públicos.
3. GUARDIA.
A pesar de que ayer el Presidente de la República acusó a la oposición de formar un bloque para batear la Guardia Nacional, lo que no tiene nada de anormal, y de balconear a los senadores que se opongan, la bancada del PRI en el Senado reiteró que si no acepta el mando civil y elimina la cadena militar de esa GN, no la votarán.
lopezdoriga.com