El único inicio posible de este apunte es felicitando y deseándole el mayor de los éxitos a este espacio de comunicación y a quien lo hace posible, Adrian Garza. Sin duda, las opiniones libres, valientes e inteligentes, en el antecedente de Adrián, perfilan un espacio alternativo a los medios formales y sobre todo a los que necesitan o prefieren la ubre presupuestal gubernamental y que por eso, la mayor parte de su información es de consigna y con intención propagandística.
A nuestro estado y a nuestro país le hacen falta, con urgencia, consolidar espacio críticos, qué den cause a la protesta, a la demanda, a la denuncia. Del aplauso fácil e inmerecido se ocupan muchos.
Tema obligado la detención y posterior liberación de Humberto Moreira en España, resultó frustrante, para muchos, la noticia de que el juez de la causa regresará el pasaporte, al ex presidente del pri y ex gobernador, luego que la fiscalía decidió no recurrir la resolución judicial.
La posibilidad de que esta decisión de la fiscalía obedezca, como dicen, a la conveniencia de no ventilar datos de gran seriedad e importancia para esta investigación mantienen la esperanza de que este asunto tenga un final de estricto apego a la Justicia y no se confirme este monumento a la impunidad.
Si los reiterados comentarios que apuntan a la intervención del presidente Peña ante el gobierno de España a favor de Moreira fueran ciertos, no habría más remedio que esperar al 2018, esperando un presidente de oposición o uno del PRI qué tome distancia del enorme mal que para nuestro país significa la corrupción y sobre todo la impunidad.
En Coahuila deberá ser de alta significación terminar con el episodio negro del Moreirato, en este afán tienen que concurrir todas las fuerzas y expresiones que no son beneficiarios de esta mafia, algunos convocan con la bandera de oponerse a la imposición y demandan piso parejo, otros esgrimen la alternancia como objetivo y ubican como adversario al PRI en su conjunto, por último los que creen que, dado el desprestigio de los partidos, el proyecto tiene que ser impulsar una candidatura independiente.
La intención del moreirismo será la fragmentación de las aspiraciones ajenas, igual dentro qué fuera de su partido, y en la medida que esta fragmentación se evite tendrá viabilidad algún candidato alternativo.
4