Los sobrevivientes del trágico naufragio de un barco pesquero cargado de migrantes al sur de Grecia aseguran que podría haber unos 100 niños en la nave hundida.
Ya se han confirmado 78 fallecidos en este suceso, pero se cree que hay muchos más, ya que algunos informes sugieren que podría llevar a bordo a 750 personas. Entre 11 y 12 sospechosos han sido arrestados en la Autoridad Portuaria de Kalamata por actividades de tráfico de personas, informó la emisora pública griega ERT.
La guardia costera del país recibió críticas por no intervenir antes, pero las autoridades alegaron que sus ofrecimientos de ayuda fueron rechazados. Los rescatistas aún exploran las aguas frente a Grecia en una operación de búsqueda masiva, a medida que se reducen las esperanzas de encontrar a más sobrevivientes.
Médicos que atendieron a los sobrevivientes -en su mayoría hombres- están divulgando impactantes historias sobre mujeres y niños que viajaban en la bodega de la nave. Según los informes, el pesquero viajaba de Libia a Italia cuando volcó.
El médico principal del Hospital General de Kalamata, que atendió a los sobrevivientes del naufragio del miércoles, declaró a la BBC que había hasta 100 niños en el barco. El doctor Manolis Makaris, jefe de cardiología, afirmó: “Ellos (los sobrevivientes) nos dijeron que había niños en el fondo del barco. Niños y mujeres”.
Explicó que dos pacientes le habían dado cifras estimadas. “Uno me dijo que alrededor de 100 niños, el otro unos 50, así que no sé la cifra real, pero son muchos”, agregó. Makaris aseguró que, según su estimación, hasta 600 personas podrían haber muerto en el desastre.
“El número exacto de personas que viajaban en el bote era 750. Esta es la cifra exacta que todos me dijeron”, expuso. Solo 104 fueron rescatadas con vida hasta el momento. El médico relató que las familias de algunos niños egipcios desaparecidos le habían enviado fotografías de ellos por si los reconocía al atenderlos.
“Fue una tragedia”, exclamó. “Nadie en Europa debe aceptar esta situación. Todos tenemos que hacer algo para que no vuelva a suceder”. Un reportero del canal ANT1 de Grecia le preguntó a un sobreviviente si había 100 niños a bordo, a lo que respondió de forma afirmativa.
La organización benéfica Save the Children también dio el mismo número, citando testimonios de sobrevivientes. La BBC no ha podido verificar de forma independiente este dato. “Desconocemos qué había en la bodega, pero sabemos que varios traficantes de personas encerraron a la gente para mantener el control“, declaró a la emisora pública ERT.
Las familias de algunos de los desaparecidos se desplazaron a Kalamata para buscar a sus seres queridos. “Mis parientes estaban en el barco”, afirmó Aftab, quien había viajado desde Reino Unido con la esperanza de encontrar a cuatro de sus parientes de Pakistán desaparecidos.
“Encontramos a uno de los familiares en el centro de rescate, pero a los otros aún no”, declaró a la BBC. Un hombre sirio de Países Bajos se vino abajo al saber que su esposa y su cuñado habían desaparecido.
El barco se hundió unos 80 kilómetros al suroeste de Pylos, informó la guardia costera griega. Según el cronograma de la guardia costera, a las 14:00 hora local (11:00 GMT) del día anterior se hizo un contacto inicial con el barco de pesca y este no envió ningún tipo de solicitud de ayuda.
La guardia costera explicó que autoridades de navegación griegas se pusieron repetidamente en contacto con el barco y este les respondió que simplemente quería navegar hasta Italia. Un portavoz de la guardia costera declaró a ERT que el motor del buque se rompió en las primeras horas del miércoles, después las personas a bordo comenzaron a moverse y la embarcación volcó. Afirmó que todos los rescatados son hombres.
Alarm Phone, una línea de ayuda de emergencia para migrantes en apuros en el mar, recibió la primera llamada del barco en peligro poco más de una hora después de que la guardia costera entablara un primer contacto el martes. La activista Nawal Soufi fue la primera en dar la alarma después de que personas dentro del barco se pusieran en contacto con ella el martes por la mañana.
En una publicación de Facebook, Soufi relata que la situación se “complicó” cuando un bote de rescate se acercó a la embarcación y le ató una cuerda mientras arrojaba botellas de agua.
Según la activista, algunas de las personas a bordo se habrían sentido en “peligro extremo” debido al temor de que la cuerda pudiera desestabilizar al bote y las peleas a bordo por el agua podrían haber provocado que volcara. El barco de rescate luego se alejó.
Alarm Phone denunció que la guardia costera permaneció “al tanto de que el barco estaba en peligro durante horas antes de que se enviara ayuda” y agregó que las autoridades “habían sido informadas por diferentes fuentes” de la situación de la nave. Sin embargo, el portavoz de la guardia costera, Nikos Alexiou, aseguró que intentaron convencer a la embarcación de que buscara ayuda y le ofrecieron asistencia.
El exprimer ministro griego Alexis Tsipras visitó Kalamata el jueves y habló con los sobrevivientes, que explicaron su teoría sobre cómo pensaban que el barco se había hundido. “La guardia costera griega pidió a la embarcación que los siguiera, pero (sus tripulantes) no pudieron. La guardia costera luego arrojó una cuerda pero, como no sabían cómo tirar de ella, el barco comenzó a balancearse de derecha a izquierda”, declaró un sobreviviente a News247.
“La embarcación de la guardia costera iba demasiado rápido, pero nuestro barco ya estaba ladeado hacia la izquierda, y así fue como lo hundió”.