El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, urgió a tomar acciones para la reapertura de los puertos de entrada a través de la frontera compartida con México.
Luego de sostener una llamada con el presidente Andrés Manuel López Obrador acerca del fenómeno migratorio en el hemisferio occidental, Biden confirmó también que en los próximos días los equipos de ambos países se reunirán para tomar nuevas medidas.
Esta mañana el presidente López Obrador había anunciado en conferencia de prensa que sostendría una llamada con su homólogo Joe Biden, a petición del gobernante estadunidense.
A través de un comunicado, el presidente Biden detalló que ha pedido al secretario de Estado, Antony Blinken; al secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas; y a la asesora de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Liz Sherwood-Randall, que viajen a México en los próximos días para reunirse con el presidente López Obrador y discutir nuevas acciones que se pueden tomar juntos para abordar los desafíos fronterizos actuales.
El anuncio llega en medio de una confusión por la reapertura de los pasos ferroviarios fronterizos de Eagle Pass y El Paso, en Texas, anunciada por la iniciativa privada mexicana, pero después aclarada por la Embajada de Estados Unidos en México.
Tonatiuh Guillén López, ex titular del Instituto Nacional de Migración (INM), aseguró que, desde el pasado gobierno de Donald Trump, México alineó su política migratoria a los requerimientos de Estados Unidos.
“Desde los arreglos con Donald Trump, México alineó su política migratoria a los requerimientos de Estados Unidos; lo que ahora está en puerta es grave porque los flujos han crecido mucho”, declaró en entrevista para Azucena en Fórmula.
El especialista apuntó que Joe Biden actualmente está muy presionado por el contexto electoral de los Estados Unidos, pues “los republicanos han presionado mucho a acerrar la frontera”.
“Hay una problemática mayor y son las presiones que tiene Biden para endurecer la frontera, este objetivo implica que México endurezca sus medidas de contención.
“Estamos en un escenario completamente opuesto a lo que dice nuestra legislación, ya no hablamos de buenas voluntades, sino lo que dice nuestro marco jurídico”, explicó.