Desde las 10:30 horas, transportistas y habitantes del circuito Río Azul cerraron la carretera federal México-Acapulco, mientras que elementos de la policía estatal, Guardia Nacional y del Ejército Mexicano buscaban impedir que lleguen hasta el Parador del Marqués, con la intención de bloquear la Autopista del Sol.
La llegada de los manifestantes se esperaba desde las 08:00 horas. Primero llegaron elementos de la Policía del Estado habilitados con equipo antimotines y posteriormente se incorporó personal de la Guardia Nacional.
Junto con los contingentes del circuito Río Azul, que comprende a los municipios de Mochitlán y Quechultenango, llegaron grupos provenientes de los pueblos del valle, entre los que se encuentran Mazatlán; Palo Blanco, Cajeles, Ocotito y Mohoneras.
Para evitar el avance de los manifestantes, los cuerpos de seguridad atravesaron sobre la vialidad vallas de metal, además de que se han movilizado las tanquetas tipo Mambas Negras que recientemente adquirió el gobierno de Guerrero.
La causa de la protesta es la detención de un dirigente del transporte público de la ruta Río Azul, que fue reclamado por la Fiscalía General de la República.
Los contingentes permanecen a distancia, frente a frente sobre la cinta asfáltica, cuya circulación en el tramo Chilpancingo-Petaquillas está cerrada desde las 10:30 horas.
Después de las 11:00 horas, cientos de habitantes del circuito Río Azul, a punta de pedradas, armados con palos y machetes desarman el cerco con el que elementos de la Policía del Estado, Guardia Nacional (GN) y militares pretendían impedirles el paso hacia el punto conocido como “El Parador del Marqués”.
Aunque lanzaron algunas bombas de gas lacrimógeno, los manifestantes no se detuvieron y comenzaron a lanzar piedras y palos, además arremetieron a golpes contra los elementos que se encontraban en el punto conocido como La Cinca.
Los policías en la atropellada retirada no alcanzaron a retirar las motocicletas oficiales, algunas de ellas fueron derribadas por los hombres que en su mayoría portaban palos.
El módulo de seguridad de La Cinca, colonia popular ubicada casi a dos kilómetros del Parador del Marques fue atacado a pedradas por los manifestantes.