Un año cae y otro se yergue frente al horizonte. El 2022 nace apenas y con él las 38 nuevas administraciones municipales en Coahuila.
Y sin perderlo de vista, el arranque de potros desbocados por la renovación de la gubernatura del 2023, se desbanda y brinca leyes y tiempos. Dícese de un potrillo nacido de rica hacienda, especialmente.
Potros y jamelgos
En la capital, deja el cargo tras 4 años de manganas y piales, Manolo Jiménez Salinas y da paso a su relevo edilicio, José María Fraustro Siller, un percherón que parece cansado de tanto espectáculo circense. Todo parece calculado por los calculadores.
Manolo, joven e impetuoso (sobrado), supo comprar voluntades e irá al gabinete estatal, y desde la cartera y el presupuesto del Desarrollo Social, arrancará su precandidatura por la gubernatura. Así aseguran los aseguradores.
Chema, maduro y lerdo (serio), compensado con la Presidencia Municipal de Saltillo (ya sin la nómina de la UAdeC a su disposición y con sus ansias de mandar en Coahuila, ahogadas en buena mesa y mejores vinos), tendrá que ayudar al proyecto manolista, a querer y no… pero, ¿José María aun sueña, y espera un resbalón oportuno (de esos que en política se dan, solos o ayudados)?
Petisos y resignados
Unos, caballos de poca alzada política, y otros, resignados cabalgantes por las decisiones que se toman cupulares y anticipadamente, (sin consenso general, y de calefactos cuando menos), son varios los que andan encabronados por la destacada de Manolo.
Pero… “ya sabían por dónde venía el tiro, que no se tiren al piso porque nadie los levantará y a lo mejor hasta los pisan“, alega risueño un operador manolista. “Mejor que se sumen y asuman (con Manolo) y luego ya veremos dónde se acomodan“. Completa la idea el enjundioso interpósito.
Pero, los capones y los enteros, todos los rocines que quieren, no están entregados.
Aunque los operadores y hasta los familiares de Jiménez andan en plena operación electorera estatal, faltan largos meses; y como dice uno que la quiere… “ya sin la tesorería municipal abierta, a ver cómo se las arregla Manolo, enfrentando liderazgos varios y regionales, y brincando obstáculos en los 38 municipios“.
Del otro lado
El PAN parece inerte, cambia una dirigencia estatal subyugada de Memo Anaya, por otra, íntica en sumisión. Y así empieza su año, con aprendices dóciles y un dueño muy mañoso (y comerciante).
Por lo que toca a competir por la gubernatura (ya adelantada por el PRI), parece que los azules esperan tranquilos a que se defina una alianza “Sí por México” y descararse de a tiro con el PRI, el PRD (y los Moreira-Riquelme).
En MORENA Coahuila la cosa es distinta, aun con pleitos y divisiones, con los infiltrados de Moreira y con los advenedizos, los liderazgos aparentes sí andan inquietos por definiciones. Pero… ¿La cargada presidencial por fin llegará cuando se ocupa, así como en otras entidades y otras elecciones?
Así Guadiana Tijerina y Mejía Berdeja, así Javier Guerrero y Luis Fernando Salazar, así Antonio Attolini y hasta Reyes Flores. Unos percherones y otros ponis, unos Mustang salvajes y otros mansos de rienda.