La decisión del gobierno federal de reanudar las clases presenciales el 30 de agosto y en Coahuila dentro de 5 días manifiesta alta incertidumbre de posibilidades de cumplirse, las causas son numerosas, repasémoslas. Son solamente unos cuantos días los que nos separan de la segunda fecha y numerosos planteles fueron vandalizados, ¿habrá tiempo en el caso federal y en Coahuila estará hecho? Porque es imperativo asegurar que los espacios están susceptibles de garantizar condiciones de seguridad para cuidar y vigilar que no haya contagios de Covid entre los trabajadores y alumnos, ventilación, sana distancia entre alumnos y otros, agua limpia para beber y lavarse las manos, los sanitarios con agua, gel, y sanitizantes, estas son parte de los protocolos de protección contra contagio del virus.
Las ventajas de las clases presenciales, son evidentes, se requiere la socialización, la interacción social que las escuelas permiten ante los problemas de salud mental que ha provocado el confinamiento infantil en los hogares, pero también se contempla que el regreso a clases provoque una explosión de contagios ante la virulencia de la tercera ola del Covid, aunque se creía que entre los infantes el número de contagios era muy bajo, sin embargo, esta semana las autoridades de salud confirman que los problemas asociados con el virus en este grupo de edad van a la alza, la preocupación es que para ellos no hay vacunación autorizada, arguyen las autoridades de salud.
Desde principios del mes de mayo el gobierno de Coahuila implementó un plan piloto estatal para el regreso a clases presenciales de más de 70 escuelas de las 2 mil 463 del sector público en toda la entidad, fueron 15 de La Laguna, 24 Sureste, 15 Centro Desierto, 11 del Norte, 5 Carbonífera. Aunque el mes pasado las autoridades de educación aclararon que en sí, no había un plan para el retorno el 23 de agosto, sino que se observaría el comportamiento de la pandemia a fin de seguir las indicaciones del sector salud local, por lo que más bien se está en una etapa de ensayo con el sistema híbrido.
La SEDU informó que fueron 852 las escuelas que requirieron rehabilitación, algunas con daños muy serios, para ello se invirtieron 250 millones de pesos, por lo que la reconstrucción ha sido lenta porque algunos de los planteles restaurados, volvieron a ser vandalizadas, un problema realmente serio que requiere el involucramiento de las comunidades a fin de poner fin al saqueo de las escuelas, deberían sentir que la escuela es de ellos e involucrarse en la resolución de sus problemas.
Ayer se definiría el número de escuelas de educación básica que podrían iniciar el ciclo escolar 2021-2022 y se emitió un programa preventivo de la transmisión de Covid, el cual es amplio y seguro y requerirá de la cooperación de los padres de familia que deberán hacer lo suyo en casa, porque también es complejo el conjunto de medidas para preservar la salud sin contagios de alumnos y trabajadores de la educación, el programa requerirá adaptaciones al contexto de cada región del estado.
Lo que se percibe es un gran trabajo que haría posible el regreso a las clases presenciales, aunque hay muchas opiniones en contra de esa posibilidad por el riesgo que implica; los indicadores sobre la situación de la pandemia en las diversas regiones estatales son distintos, algunas podrían estar en semáforo rojo o amarillo, pocas en verde, de manera que seguramente serán necesarias medidas preventivas variables en cada zona y una vigilancia intensa y puntual por parte del magisterio el que cuenta con un espíritu de cooperación y sensibilidad del que no hay duda.