Sabemos que los Moreira son la corrupción de Coahuila junto con su gerente Riquelme y su gabinetes insaciables, sabemos también que Rubén Moreira llegó a la PRI-pluri, por el fuero, y de ahí a la Junta de Coordinación Política para comprar impunidad por la venta de los votos para la reforma eléctrica.
Siguen saliendo los elementos de prueba de las tranzas y los fraudes de Rubén en FICREA, y las empresas fantasma con que robó los millones del presupuesto federal para el combate a la pobreza.
Y nada pasa, no hay justicia para los coahuilenses como no la hay para los mexicanos en general.
Si los hermanos e hijos del presidente son exculpados de traficar con dinero y tener Casa Gris por favores de proveedores del gobierno federal, si el fiscal de la República a más de inútil en el cargo se debate entre videos de sus propios conflictos de interés y de evasión de la ley, ¿cómo imaginar al capo y Gordo Moreira en la cárcel, con debido proceso y sentencia larga (y regresando lo robado)?
Hay que seguir
Aquí en ColumnasDeMexico.com no nos cansamos de decir las verdades incomodas y de denunciar la corrupción y la inacción de la justicia nacional y de Coahuila, yo como editorialista por supuesto que tampoco (quien dice se ha cansado es otro), no lo haremos aunque nos digan nuestros seguidores “ya sé que son corruptos y me enoja volver a saberlo con esos datos duros”, “¿para qué publicar si nada pasa?
Seguimos informando que la madre de la corrupción es la impunidad que priva en México: la de antes y esta de ahora; la de los corruptos de antes y los de ahora; la de los de fuera del gobierno y de los de dentro; la de los gobiernos del PAN, la de los del PRI y los de MORENA. La corrupción de los políticos y la de sus familiares.
También decimos que… la corrupción no ha acabado y que quien lo presuma, miente y agrede con esa falsedad que tiene encabronada a la sociedad y que es razón del agotamiento de la imagen y aceptación de los modelos y de los gobiernos. De la propia del gobierno federal actual, de su partido MORENA, de su Cuarta Transformación y en especial de la del presidente López Obrador.
Facilito
Es fácil arreglar el asunto, digo sin hay voluntad justiciera.
Son claros los nombres de varios políticos tan corruptos como criminales, no necesariamente tienen que entrarle al reto de juzgar y encarcelar expresidentes pero sí a exministros como Luis Videgaray Caso, por ejemplo, corrupto que aparece en tantas intrigas y negocios sucios, a exgobernadores como Rubén Moreira Valdéz, por ejemplo, rufián que sigue robando a manos llenas vía sus gerentes, sus arreglos mafiosos y su venta de votos del PRI para reformas cuestionadas, pactadas con MORENA.
Usted está en bajada señor López Obrador, su único escalón de regreso al estatus de aprobación social de hace tres años es la justicia, sin shows que distraen y enojan, una justicia, sí, con procesos limpios, expeditos y cárcel sin privilegios a estos personajes del arrabal político.
¿Le entra usted AMLO al rescate de la justicia, o seguiremos igual en México, echando culpas a otros y solo le apostará al resultado de una consulta de revocación de mandato, arreglada?