Lastimoso es que a Coahuila se le vea como la cloaca del PRI, es claro, hiede y supura porque Cloaca ES.
El tema migratorio sigue desafiante en la frontera de Coahuila con Texas, con capítulos más virulentos.
El gobierno federal mexicano, deja correr la bola, y el estatal, se encharca en negocios sucios con carteles traficantes.
El Título 42
El Título 42 de la deportación inmediata, se canceló con la declaración del fin de la pandemia del Covid-19, y entonces, la migración se desbordó, incontenible: auspiciada desde el sur de USA, con México al centro.
(Título 42: “Los agentes fronterizos pueden deportar de inmediato a migrantes que procedan de Canadá y México, para salvaguardar la salud de los norteamericanos“).
Desquiciados los cruces fronterizos por migrantes apurados a cruzar a toda costa, sin medir consecuencias; al tiempo, la vera del Bravo se volvió más porosa y los polleros pululan cual sanguinarios en tierra de nadie.
Policías del infierno
Las policías de Coahuila, que son varias y corruptas, con fama bien ganada de terroristas y madrinas de capos, ensucian más la tragedia migrante.
El negocio de los Moreira y Riquelme, su gerente de negocios, es también por el crimen de los GATES, esa policía del infierno.
No respetan ni el tiempo de campaña, para los negocios, tiempo donde van saliéndose con la suya al dejar a un incondicional y manipulable en el gobierno, para seguir por 24 años degradando a Coahuila, desde el corrupto moreirato.
Inseguridad
Coahuila es insegura entidad, y quien no vea esta realidad, es porque, ciego y sordo, se ha conformado.
El tráfico de migrantes se volvió el negocio desalmado, y ahí, en ese crimen de lesa humanidad, los corruptos políticos que sacan ventaja por los sobornos, conocerán el infierno.