El compañerismo es in duda un valor y el cultivar los valores, nos convierte en personas buenas, decentes, confiables.
El compañerismo es la actitud de quienes se acompañan y se apoyan entre sí para lograr algún fin. Compañerismo se denomina también esta clase de vínculo entre compañeros, así como la situación de armonía y buena correspondencia entre ellos.
La palabra, como tal, se compone del vocablo compañero, que proviene del latín companĭa, y del sufijo -ismo, que indica actitud.
El compañerismo es un sentimiento de unidad
que surge entre los integrantes de un grupo o una comunidad humana. Se fundamenta en valores como la bondad, la solidaridad, el respeto y la confianza, y en sentimientos como la amistad y la empatía. Como tal, se practica con reciprocidad, es decir, de manera mutua.
El compañerismo es fundamental para la convivencia y la vida social. Se pone en práctica cuando ayudamos a un compañero en algo, cuando nos involucramos en una tarea o proyecto grupal, o cuando ofrecemos nuestro apoyo incondicional en momentos difíciles.
Así, el compañerismo facilita el trabajo en equipo, fomenta el espíritu de unidad grupal, y nos proporciona muchas satisfacciones en nuestra relación con nuestros pares. Puede verse en ámbitos de nuestra vida cotidiana, desde la escuela hasta el trabajo, y fundamentalmente en la práctica de deportes grupales.
Un equipo de fútbol es un buen ejemplo de compañerismo cuando sus elementos trabajan con base en la colaboración, la confianza y el apoyo mutuo dentro del terreno de juego para concretar sus objetivos, que son neutralizar y vencer al rival. Además, un equipo donde haya compañerismo funcionará mejor en el campo y será más eficaz y compacto de cara al adversario.
En la formación del espíritu de compañerismo intervienen muchos factores importantes: el respeto y la confianza entre sus elementos, la posibilidad de ser capaces de llegar a acuerdos, de ceder, de dialogar y escuchar.
(Significados).