Un tribunal de Ecuador declaró este martes al expresidente Rafael Correa culpable de un delito de corrupción y lo condenó, en primera instancia, a ocho años de cárcel por el conocido como “caso sobornos 2012-2016”.
El exvicepresidente Jorge Glas, que como Correa fue considerado culpable de ser instigador de un delito de cohecho pasivo agravado, también fue condenado a ocho años de prisión.
El conocido como “caso sobornos 2012-2016” trata de una trama de corrupción montada, según los jueces, bajo el gobierno de Correa y que involucraba a empresas nacionales e internacionales como la brasileña Odebrecht.
Se trataba de recibir pagos para financiar el movimiento político del exmandatario, Alianza País, a cambio de adjudicar contratos millonarios.
“Mamarrachada”
El expresidente, quien gobernó el país desde 2007 al 2017 y que en la actualidad reside en Bélgica, se ha convertido en un crítico del gobierno de Lenín Moreno, y ha considerado este y otros procesos abiertos en su contra como una “payasada”.
Un un mensaje el Twitter, Correa rechazó la decisión del tribunal de justicia nacional, que aún puede ser apelada.
“Bueno, esto era lo que buscaban: manejando la justicia lograr lo que nunca pudieron en las urnas”, escribió.
“Yo estoy bien. Me preocupan mis compañeros. De seguro ganaremos a nivel internacional, porque todo es una mamarrachada, pero toma años”.
También criticó esta sentencia que se produce en medio de la pandemia del coronavirus, cuando Ecuador es uno de los países de América Latina con mayor cantidad de muertos.