Durante años, el régimen de La Habana ha obligado a los médicos y enfermeras cubanos a trabajar en el extranjero, por centavos de dólar, para mejorar la propaganda del régimen de que su atención médica es de clase mundial, acusa el senador Marco Rubio y diputados estadounidenses.
El senador Marco Rubio, presidente del Comité de Inteligencia de la Cámara Alta de Estados Unidos, y los diputados María Elvira Salazar, Mario Diaz-Balart y Carlos A. Gimenez hicieron un llamado a investigar posibles violaciones del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), por México al contratar personal médico de Cuba.
La denuncia fue enviada por medio de una carta, el pasado 25 de abril, a Samantha Tate, Jefa de División para el Monitoreo y Cumplimiento del T-MEC.
De acuerdo con la Secretaría de Salud de la Ciudad de México, el 27 de abril de 2021, se incorporaron 585 profesionales de la salud acreditados por el Ministerio de Salud de Cuba, con perfiles de epidemiología, medicina general integral, medicina crítica, biomedicina, enfermería general y enfermería especializada, para ubicarlos en hospitales Covid-19.
La incorporación de los profesionales cubanos tuvo inconvenientes. Por ejemplo, Julen Rementería, senador del Partido Acción Nacional (PAN), denunció en septiembre de 2021 que el gobierno de México orquestó un fraude de 255 millones 873 mil 177 pesos al presupuesto de salud, al contratar a 585 “falsos médicos” que no tenían título, para tratar a mexicanos con Covid-19.
La secretaria de Salud de la Ciudad de México, Oliva López Arellano, aseguró a Diario de Cuba (DDC) que el trabajo de los cubanos era “voluntario”, y la suma del convenio era para cubrir el salario, así como la capacitación, especialización, asesoría e investigación conjuntas. Además, la funcionaria agregó que los profesionales no tenían libertad de movimiento por las restricciones de la pandemia.
En julio, cuando la Ciudad de México dio por finalizada la “misión” y los primeros cubanos regresaron a la isla, López Arellano confirmó que el gobierno local había pagado por su trabajo 135 millones de pesos mexicanos (más de 6 millones de dólares).
Sin embargo, el medio cubano supo que, de los aproximadamente 10 mil 700 dólares que pagaba como promedio el gobierno mexicano por cada uno de los 585 médicos y enfermeros cubanos, La Habana solo les dio 660 dólares para tres meses (220 dólares por mes). A los profesionales cubanos se les dijo que los 220 dólares que recibían eran “para comida”.
En junio, DDC reportó que una doctora cubana integrante de la brigada había escapado de la “misión” y se encontraba en paradero desconocido. Según su fuente, desde que los médicos arribaron a México hasta junio de 2020 se habrían producido alrededor de 15 fugas, aunque en ninguno de esos casos hubo trascendidos oficiales.
Cabe resaltar que al que escape de una misión le queda prohibido volver a Cuba en ocho años.
Violación al T-MEC
En la carta, se señala que el T-MEC es el estándar para los acuerdos comerciales y tiene disposiciones sólidas para defender criterios laborales y de derechos humanos, por lo que estas disposiciones deben aplicarse rigurosamente para garantizar que Estados Unidos respete este acuerdo y los estándares de derechos humanos.
La petición, indica que el Capítulo 23 del T-MEC dice que las partes deben comprometerse, cooperar y responsabilizarse mutuamente para combatir el trabajo forzado y la trata de personas. Además, indica que los pares reconocen el objetivo de eliminar todas las formas de trabajo forzoso u obligatorio y se comprometen a prohibir la importación a su territorio de bienes producidos con trabajo forzoso, y que las partes establecerán la cooperación para la identificación y circulación de bienes producidos por trabajo forzoso.
Según el Departamento de Estados Unidos, las misiones médicas internacionales de Cuba son una forma de trata de personas y esclavitud moderna, indica la carta del senador y los diputados.
“Durante años, el régimen de La Habana ha obligado a los médicos y enfermeras cubanos a trabajar en el extranjero, por centavos de dólar, para mejorar la propaganda del régimen de que su atención médica es de clase mundial”, denuncia el senador Marco Rubio.
“Por lo tanto, solicitamos que la Oficina de Supervisión y Cumplimiento del T-MEC considere abrir una investigación oficial sobre este tema, coordinado directamente con la Oficina de Asuntos Laborales Internacionales, el Departamento de Estado, el Departamento de Comercio, el Representante Comercial de los Estados Unidos y cualquier otras agencias relevantes”.