Este cuerpo es mío, no se toca, no se viola, no se mata.
La violencia de género no tiene freno, no se detiene, es una pandemia que se propaga y contagia en toda la humanidad, por ello surgen organizaciones colectivas feministas y grupos de acompañamiento a víctimas, que se conformaron para demandar respeto a los Derechos Humanos de las mujeres, acceso a la justicia y atender las problemáticas que las autoridades dejan en el olvido, aunque en el proceso pongan su vida en riesgo.
Según la Secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Rosa Isela Rodríguez en lo que va de este año en este país se incrementaron un 5 % los feminicidios que llegaron a 842, el número más alto fue en el mes de mayo, 105 crímenes y en agosto 109 ¿influirán la primavera y el verano en el ADN masculino para atacar y matar mujeres?
Al menos en 15 municipios se concentran los ataques violentos a las mujeres, con lo que los delitos sexuales crecen y no hay solución que los detenga. Por ello surgieron los grupos y organizaciones que acompañan, investigan y exigen justicia en contra de los ataques violentos en contra de las mujeres; porque la empatía y la rabia que suscitan los hechos surgen del presagio, de la intuición de que mañana pudieran ser ellas o sus hijas las agredidas. Mañana es el Día Mundial en Contra de la Violencia hacia las Mujeres.
Las organizaciones feministas en contra de la violencia han actuado en defensa de los casos de violencia en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), facultades y escuelas de otras universidades públicas de otros estados salieron a la luz y fueran apoyados a través de distintas acciones; en la UA de C las alumnas de Jurisprudencia han documentado casos de violencia por los que solicitan sanciones y acompañamiento a la organización Red de Confianza, las alumnas identifican, una estructura interna y los discursos y actitudes de poder que limitan e invisibilizan las agresiones a las estudiantes (Miradas de género. UA de C, 2021).
En Saltillo, el transporte en autobús urbano es el espacio más propicio para que los hombres realicen acoso sexual a las mujeres mediante tocamientos y manoseos durante los viajes, además de agresiones desde miradas lascivas, silbidos y guiños, de conductores y pasajeros, además de comportamientos más violentos, como toques inapropiados y hombres exponiendo sus genitales o masturbándose; también manifestaron haber enfrentado golpes en los glúteos; esto no es nada nuevo, históricamente es usual.
Recientemente estuvo en Saltillo, la representante de la ONU de la Comisión Contra la Desaparición Forzada, fue recibida por el Centro De Derechos Humanos Juan Larios, CDHJL, cuyo directivos expusieron que Coahuila es un estado que hasta el día de hoy cuenta con 3,452 personas desaparecidas, ejemplo de impunidad y de violencia exacerbada, por lo que se vive localmente una crisis humanitaria exacerbada. La Comisión Nacional de Búsqueda informó que en el estado hay un incremento de 3 679 desparecidos, lo cual afirma el CDHJL, calculan que en promedio 122 personas desaparecen al mes, por lo menos 3 diarias, de los que no hay datos públicos, solamente discurso político mediático.
Estos datos incluyen mujeres y hombres no localizados. La búsqueda en vida es importante porque se les puede encontrar en situación de calle, se les quiere con vida, la omisión de las autoridades es clara, no integran carpetas de investigación ni realizan los procesos que las leyes indican. Se han realizado búsquedas en fosas clandestinas, pero las malas prácticas no se corrigen, siguen desapareciendo a los desaparecidos.
Las violaciones a los derechos humanos están vigentes en Coahuila, hay discursos, pero en los hechos la violencia impera.
Que se abra la Plaza de Armas que es violencia en contra de todos los ciudadanos saltillenses, mujeres y hombres.