Saltillo se encuentra a punto de una crisis hídrica como la que vivó Monterrey entre 2022 y 2023, indicó la doctora Rosario Sánchez Flores, investigadora del Instituto de Recursos Hídricos en la Universidad de Texas A&M.
Explicó que la disponibilidad del agua subterránea en la capital del estado cada vez es menor, mientras que la población está en incremento, lo que complicará en algunos años el abasto y la calidad de agua potable en los hogares.
“El año pasado no va a ser una excepción, esa es la nueva realidad, sabemos que la ciudad ahorita está en el límite de lo que el sistema de agua subterráneo puede proveer en equilibrio, digamos, por lo menos de acuerdo a los números proporcionados por las instituciones que regulan el agua en Saltillo“, puntualizó.
La experta en la administración del agua, señaló que el “Día Cero” en la crisis hídrica en México se vivió el año pasado en Monterrey, por lo que se tendrían que tomar medidas para mejorar la gestión, uso y distribución de los recursos hídricos.
“Honestamente ya no falta mucho para tener una condición como la que sufrió o la que está sufriendo todavía Monterrey, nosotros porque como no vemos el agua subterránea creemos que va a estar ahí por siempre, pero sabemos que ya estamos al límite del sistema”, manifestó.
Factores de riesgo
Advirtió que el calor que se avecina para este año aumentará la demanda de agua potable y que la solución no son nuevas perforaciones, ni más extracción de los mantos acuíferos, sino el cambio de paradigma.
Detalló que el rehúso del agua puede ser la oportunidad de mejorar el panorama de Saltillo y Coahuila, tal como ocurre en otras partes del mundo.
“Con las proyecciones de crecimiento poblacional y obviamente con mayor calor en la ciudad y en todo el estado, esto no nada más es en Saltillo, es en todo el estado y básicamente en la cuenca, y con esto ya nos pone en un desequilibrio”, explicó.
“Seguir sacando agua subterránea, es más barato que invertir en la conservación, eso es un mito y es un error garrafal, no hay agua más barata que la que ya tenemos y la estamos tirando”, añadió Sánchez Flores.
Destacó que la conservación y reutilización serían las mejores formas de prevenir la crisis hídrica, ya que mucha del agua potable se desperdicia en actividades que pueden realizarse con agua tratada, como en la industria o la agricultura.
Desde el hogar
La también directora del Foro Permanente de Aguas Binacionales, señaló que se requieren políticas públicas que mejoren la administración del agua.
Recomendó reparar las pequeñas fugas, para evitar que el agua se desperdicie sin ni siquiera usarla, además de implementar estrategias para captar el agua de la lluvia y así utilizarla en el hogar.
Dijo que el tener jardines con plantas de la región, disminuye la necesidad de ser regados y enfatizó en la importancia de revisar los hábitos de consumo, ya que todos los procesos de producción requieren agua.
La saltillense expuso que se tira hasta el 25% del agua disponible para el consumo durante un año, a través del desperdicio de comida, por lo que aconsejó reducir el desecho de alimentos, que en México representa ya el 30%.