El 28 de agosto, en 2 días, es la fecha avisada en la que inician las encuestas de MORENA (y para MORENA), para definir quién coordina la 4T, pero que en realidad validarán quién es el candidato presidencial.
Del 28 de agosto al 3 de septiembre se corren las encuestas que justifican el palomeo o que “eligen”, simuladamente, al candidato presidencial de MORENA para la elección del 2 de junio del 2024.
Los del Frente opositor definirán a su “elegido”, 3 días después (6 de septiembre).
La oposición errante, el Movimiento Ciudadano, dice que en noviembre tendrá candidato (no dice cómo lo definirán, pero si se escinden en la decisión de no sumarse al bloque opositor, y hasta ahora… ¡irán solos!).
El desorden
MORENA empezó el desorden: Adelantó el reloj electoral, se pasó la ley electoral por el arco del triunfo, simula NO CAMPAÑA cuando trae a 6 en proselitismo abierto y con recursos públicos… ¡Y a una favorita!
Disfrazan la campaña ilegal y anticipada con elecciones internas de comités 4T, lo hacen con encuestas manoseadas y que calificarán dentro de MORENA. De esta forma si el tlatoani quiere a Claudia, Claudia será y el 3 de septiembre lo anunciarán.
Y entonces, el desorden se imita.
Los enemigos de ayer, enfundados en un Frente opositor (el Frente Amplio por México, sustitución del Va por México del PRI, PAN y PRD), se reúnen, imitan la maña electorera y dicen que caminarán por el país para definir quién coordinará el FAM, cuando en realidad también hacen campaña para elegir a su candidato presidencial. Tampoco dicen con qué dinero.
Imitan también el método, copian los del FAM a MORENA y dicen que las encuetas son la democracia a la mexicana, la modernidad democrática del Siglo XXI (encuestas, cucharas y favoritos del dueño del changarro).
9 meses
Los meses exactos de un embarazo, 9, separan estos eventos de hoy con la elección presidencial. Las figuras que den claridad a un horizonte ensombrecido, ya están en el cocedor.
Muy temprano habrá candidatos, aunque en tiempos electorales por venir, se vista a los aludidos con acreditaciones oficiales, asambleas electivas internas y registros legales.
La guerra empieza
La guerra electoral empieza.
De un lado, AMLO, aferrado en continuar con el poder, metido en la elección y con el aparato oficial, por el “no conservadurismo”; del otro lado, los opositores “unidos”, organizados y dirigidos por la IP y las ONG, que a toda costa buscan impedir más MORENA (“más socialismo”).