Por su parte el Instituto afirma que es imposible que se vacune a alguien que no debe serlo.
Personal médico del IMSS de las clínicas 1 y 2 se quejó del influyentismo que asegura existe de parte de líderes sindicales y de mandos superiores para “colar” a las listas de vacunación a personas que no se encuentran en la primera línea de la batalla contra el COVID-19.
El instituto respondió, y aseguró que es imposible que se vacune a alguien que no deba serlo, no obstante, esa práctica incorrecta sí se ha admitido por la dependencia, por ejemplo, en la CDMX.
Doctores y enfermeras consultadas por Vanguardia extendieron su inconformidad por la forma en que aseguran se está designando a quienes serán inoculados con el biológico de Pfizer BionTech.
Coincidieron que por cada camión que sale al 69 Batallón, siempre hay en promedio unas seis personas que por alguna razón no quieren vacunarse, “huecos” que son aprovechados para incluir a gente que no tiene por qué recibir la dosis.
“De las clínicas salen camiones militares en el que viajan 30 personas (médicos, doctoras, enfermeras, enfermeros y demás personal), pero siempre hay en promedio seis que no van porque no quieren ser vacunados”, señaló una de las enfermeras.
Están vacunando gente que no, no es justo, señaló otro médico inconforme, quien añadió que por ejemplo mandaron a ser vacunada a una doctora, hija de una ex regidora, y que estuvo colaborando en un programa de cirugía bariátrica de la Secretaría de Salud del Estado, el cual ya fue suspendido.
“Están vacunando a gente con palancas, con relaciones en el Seguro Social; están vacunando a conocidos de líderes sindicales en Monclova y Piedras Negras”, se quejó.
REPORTAN A ENFERMERA
Otra trabajadora del IMSS señaló directamente a una enfermera de nombre Olga Lidia Rodríguez González, jefa de enfermería del Hospital General de Zona 2, de estar ordenando meter en las listas a personas que no se encuentran en la primera línea de batalla en esta pandemia.
Por su parte, Leopoldo Santillán representante del IMSS en Coahuila, negó las versiones y aseguró que es prácticamente imposible que se “cuele” dentro de las personas a ser vacunadas, alguien por influyentismo o que no esté en la primera línea de batalla contra el COVID-19.
“Eso es imposible porque el censo está controlado desde la SEDENA hasta el lugar de traslado de las personas en los autobuses que trasladan a todo nuestro personal, nadie sube si no está anotado en el censo y ese censo ya está validado desde hace un mes”, dijo.
Aclaró que no sólo son médicos o enfermeras a quienes se vacuna, sino también trabajadores que tienen contacto con áreas COVID o pacientes, como asistentes médicas, radiólogos, personal de higiene y limpieza, auxiliares de laboratorio, trabajo social, camilleros, entre otros.
Vanguardia