Divorcio: libertinaje e impunidad

¿De quién se divorció Moreira, de Carolina o de Meade, o de ambos?

La vida privada de Rubén Moreira es algo que me tiene sin cuidado. Mencionamos rasgos de aparente privacidad, cuando estos explican injerencias políticas o públicas. A este patético Moreira, (y hay varios), le gusta ventilar sus miserias humanas, (y son varias).

Su destino social lo tiene bien ganado (como la cárcel).

Libertinaje

Es tan cínico Rubén que mendiga con la lástima social.

Así lo hizo cuando estaba enfermo de cáncer (llorando mediáticamente). Ahora, es él mismo quien mediatiza su divorcio, cual crónica esperada.

¿Quién creyó que se casó de verdad?, si sabemos que fue para tener pareja en el sexenio, y que era tan maltratado como nosotros por él. Que sus vidas eran separadas y las selfies, juntos. Que tenían; “modos y modas, modas y modos”, de cada quién. Que su vida conyugal como la política, es simulación y mentira.

Cierto, como sociedad coahuilense, nos costó carísimo el experimento del matrimonio de conveniencia. La señora esta (de Moreira), dilapidó el presupuesto de Coahuila en viáticos, guaruras, aviones, negocios de “Los Amigos de Hidalgo”, de empresas fantasma y juicios orales. Hizo, Carolina Viggiano, trizas a la Familia social: trajo una suerte de leyes libertinas y promiscuas, (ajenas a la sociedad coahuilense pero igualitas a ella… y a él), y, por un segundo que nos pusimos los pantalones, evitamos que nos legalizara el aborto, avieso propósito.

Dejaron a Meade

Dejaron a Pepe Meade, (aunque nunca lo quisieron pero lo usaron); porque la estrategia no lo hace prender (y ellos Viggiano-Moreira, son destacados estrategas del cuarto negro de la campaña del PRI). Lo dejaron, claro, a Meade y al PRI, luego de regatearle las candidaturas pluri que hasta hoy les da fuero. Así como el gobierno espurio de Riquelme, los protege.

Son cínicos, están fuera, pero siguen ahí. Se enredan con los competidores (MORENA Y PAN) pero ostentan sus cargos partidarios, y cobran por ello.

Ya andan comprando con dinero de la tesorería de Coahuila y de los sobornos (en suburban retocadas de dólares negros), patente de corzo con AMLO y hasta con Anaya. Tienen tanto que perder Los Moreira, todos, y la Viggiano, toda.

Son ladrones y criminales estas familias, y sobre todo esa pareja tan dispareja.

Impunidad

Hasta hoy están impunes estos malvados. Quién sabe si con un nuevo presidente logren un paso a la vida libre, como tendrían con Meade, si acaso tuviese alguna oportunidad de ganar la elección (pero no, no es el caso).

Cien mil millones se estima el robo, solo de Rubén Moreira, a las arcas de Coahuila.

Y este Moreira es el segundo, de ocho y familias. Más lo de Viggiano y las cuñadas y cuñados. Y la MegaDeuda de Humberto y Rubén, que se pagará (pagaremos los coahuilenses) en cinco sexenios y que sigue creciendo con Riquelme, porque siguen pidiendo, y que están a punto, (pasando la elección), de anunciar su “reestructura” (para “ahorrar millones” … y recibir millones).

¡Libertinaje e impunidad es igual a Moreira

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