El mexicano que le ganó una Liga al Bayern Munich: Pável Pardo

Pável Pardo hizo lo que hoy es imposible: quitarle un título de Alemania al Bayern Múnich.

Lo consiguió durante la temporada 2006-2007 con el Stuttgart. El contención mexicano llegó a la Bundesliga con treinta años cumplidos después de haber construido una sólida carrera en el futbol mexicano. Nadie lo hubiera podido saber cuando su fichaje se concretó, pero Pavel hizo historia de la grande en el modesto club teutón.

Quizá tenían que pasar 15 años para dimensionar que lo que Pavel Pardo, junto a Ricardo Osorio, consiguió en aquel 2007, pues hoy en día el Bayern Múnich domina a placer su campeonato y ha hilvanado diez títulos consecutivos en los que apenas ha tenido rivales dignos de ser considerados oposición. Pero el gigante bávaro ni siquiera pudo pelear hasta el final por la corona en aquella temporada. El título del fútbol alemán se definió entre el Schalke 04 y el Stuttgart, que a comienzos de temporada jamás hubiera imaginado que podía pelear por la cima de la clasificación.

Pardo llegó en 2006 tras finalizar su participación con la Selección Mexicana en el Mundial de Alemania. Desde un año antes, en la Copa Confederaciones 2005, el mediocentro del América ya había llamado la atención de algunos clubes europeos, pero su fichaje lucía muy complicado: ya rozaba los treinta años y estaba más que consolidado como un estandarte en el futbol mexicano. No tenía nada que demostrar a nivel local y su comodidad estaba asegurada. Además, ganó el título del Apertura 2005, título que se sumó al que ya había conquistado en 2002, para certificar su condición de referente americanista.

 

 

Desde su época en el Atlas, club que lo formó y debutó en Primera División en 1993, Pardo mostró la pulcritud de su juego. Fue cuestión de tiempo para que llegara a la Selección Mexicana: jugó el Mundial de Francia 98 con apenas 22 años de edad y, en 1999, formó parte del histórico equipo que conquistó la Copa Confederaciones contra Brasil en el Estadio Azteca. Tras un breve paso por Tecos, Pardo llegó al América en ese mismo 1999. En Coapa terminó por asimilar su conversión de lateral derecho a mediocampista.

Con un juego discreto pero metódico y cerebral, Pardo calificaba como organizador nato. Desde la medular, movía los hilos de su equipo y servía balones con una precisión asombrosa. Los tiros libres eran un auténtico peligro con él. Bien podía enviar el esférico a la escuadra para firmar un gol antológico o asistir a algún compañero con un pase quirúrgico. Esas cualidades fueron bien valoradas por Ricardo Antonio La Volpe, que le entregó las llaves del mediocampo mexicano en el proceso rumbo a Alemania 2006, tras haberse quedado fuera del Tri en el Mundial de 2002.

Su actuación en aquella cita cautivó al Stuttgart, un equipo habituado a la media tabla que, a lo mucho, podría permitirle a Pardo cumplir su sueño de jugar en Europa. Sin embargo, ambos superaron las expectativas iniciales:

Pável se convirtió en líder en el equipo y desplegó su futbol a placer. Paso a paso, el humilde Stuttgart le ganó la carrera al Bayern Munich, Werder Bremen y, finalmente, al Schalke. El mexicano se coronó campeón el 19 de mayo de 2007.

Pardo siempre se dejó guiar por una mentalidad ganadora. Ajeno a escándalos, su impronta era hablar dentro del campo y ejercer su liderazgo con el ejemplo. “Yo iba decidido a triunfar. Eso me llevó a todo lo demás. Todo inicia con tu pensamiento y después con tus acciones. Yo quería demostrar, allí no era nadie, era la realidad, tenía que demostrar quién era, por qué me habían contratado, demostrar que era mejor que los alemanes”, dijo en entrevista con la página oficial de la Bundesliga.

En 2009, Pardo decidió volver a México con el América, donde ya no pudo mantener el nivel que había mostrado en los años previos y terminó exiliándose en la MLS con el Chicago Fire. Pero su carrera ya era perfecta para ese momento. Había conseguido una hazaña colosal que con el paso de los años se hace más grande. En 15 años, sólo tres equipos diferentes al Bayern pudieron ganar la Bundesliga: Dortmund, Bremen y el modesto Stuttgart. 

Pável Pardo fue parte de esa gesta heroica que se mitificará más conforme la hegemonía del Bayern se eternice torneo tras torneo.

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