¡Todavía más luz! como el poeta,
piden luz nuestras almas solitarias.
¡Que se enciendan las lámparas,
y que se abran las ventanas!…
Y si no basta el sol para mirarnos
¡Que se enciendan las almas!
¡Todavía más luz! como el poeta,
piden luz nuestras almas solitarias.
¡Que se enciendan las lámparas,
y que se abran las ventanas!…
Y si no basta el sol para mirarnos
¡Que se enciendan las almas!