Luego de la resolución emitida por la Dirección del Registro Nacional Agropecuario, este lunes tomó posesión de la administración y de los activos el nuevo consejo directivo encabezado por Fernando Cantú González, en lugar de Joaquín Arizpe Dávila.
El apoderado legal de la Unión Ganadera Regional de Coahuila (UGRC), Javier Liñán, dio a conocer que tras la elección del 14 de mayo en el que bajo irregularidades se nombró presidente a Joaquín Arizpe Dávila, se procedió a impugnar ante la autoridad competente, y luego de analizar el caso se determinó que la mesa directiva que hoy toma posesión fue la legítima ganadora.
“El Registro Nacional Agropecuario, dependiente de la Secretaría de Agricultura, fue la que analizó detalladamente el caso, por las irregularidades que se llevaron a cabo durante el proceso de la elección, por lo que determinó que Fernando Cantú González es el nuevo presidente por haber obtenido el voto de la mayoría de las asociaciones ganaderas”, explicó.
La nueva administración de la UGRC cumplirá con todos los lineamientos de las leyes en el que se establece que las Asociaciones y la Unión Ganadera, son instituciones que tienen como objetivo el fomento a la industria ganadera, las que están reguladas por leyes federales con excepción de un reglamento del estado que es el que se crea cuando hay una unión.
“Desde los tiempos de Óscar Flores Tapia somos Unión Ganadera Regional porque se tiene el número suficiente de asociaciones, por lo que la idea es darle continuidad, llevar a cabo una correcta administración y sobre todo fomentar que haya mayor exportación, entre otros aspectos”, refirió.
Dijo que se llevará a cabo el proceso normal: exigir un inventario así como un análisis de todos los activos y pasivos con los que se cuenta, ya que hay empresas filiales al organismo que estarán sujetas a una revisión, y posteriormente ver la decisión que se tomará, si es que se encuentran anomalías.
Ante esto Joaquín Arizpe Dávila declaró, “lo que hicieron fue un proceso ilegal, se saltaron pasos de la Confederación y de la ley de organizaciones ganaderas para inscribir un acta de asamblea que nunca sucedió; fue un abuso de poder al usar facultades que no tienen para anular una elección y dar un fallo directamente a un particular que dice que él ganó; esto es algo que nunca había pasado en la historia de la ganadera”, puntualizó.
Además señaló que fue un acto intolerable para los ganaderos coahuilenses que lo único que buscan es trabajar por el bien de este gremio, y que el tema de la seguridad está preocupando a la industria privada, ya que es inaceptable que intervengan funcionarios federales que aprovechan sus puestos para movilizar la fuerza pública a favor de algunos cuantos.