Coahuila aún no está libre de gripe aviar, la cuarentena se mantiene y es vigilada por el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA), por lo cual la movilidad de los productos avícolas está reducida, pero no ha habido desabasto de pollo y huevo.
Así lo comentó José Luis Flores Méndez, quien precisó que la cuarentena terminará cuando en las 23 naves detectadas o con sospechas de gripe aviar en la Laguna, que son 13, y en la Región Sureste, con 10, estén totalmente sanitizadas, al igual que su personal, herramientas y medios de transporte, y que sean repobladas después de sacrificar a las infectadas.
El secretario de Desarrollo Rural apuntó que afortunadamente se actuó rápido y solo se afectó la población de aves de estos puntos, de un total de 364 que hay en estas regiones, donde la mayoría están en la Laguna con 262.
Destacó que los trabajos antes mencionados se tienen que realizar porque en la entidad no se busca solo vacunar en contra de esta enfermedad, sino repoblar con parvadas limpias para que Coahuila se considere como zona libre de este padecimiento que afecta a los productores apícolas.
“Toda la sanitización es necesaria para que los subproductos de este ramo, como la gallinaza y la pollinaza, que se genera en estas naves sirva como auxilio en la agricultura”, agregó.
Explicó que si bien los traslados de productos avícolas no se han suspendido al 100 por ciento en la entidad, estos si se han reducido porque todos los productores que están en condiciones de hacerlo requieren de un permiso y la documentación que les pide SENASICA, que va dentro de un protocolo sanitario ya establecido.
“Afortunadamente este problema no llegó a ser catastrófico y no ha llegado a faltar carne de pollo, ni huevo porque las partes donde no se presentó esta gripe siguen con su producción”, apuntó.
Por otro lado, mencionó que aún no se tienen reportes graves de mortandad de ganado a consecuencia de la sequía que prevalece en la entidad, pero que por medio de un acuerdo la federación se hará cargo de los problemas que enfrentan los productores pecuarios, mientras que el Gobierno del Estado lo hará con el sector agrícola.
Pero apuntó que en condiciones normales los ganaderos recurren a la secretaría a su cargo cuando hay algún daño y no se cubren las indemnizaciones acordadas, pero que hasta el momento no se ha tenido ninguna queja o alguna señal de algún daño catastrófico en la producción pecuaria.
“El ganado muere por varias circunstancias, como puede ser por edad, o por los efectos del clima, pero cada vez que hay menos pasto los ranchos sacan su ganado a tiempo, lo matan lo venden o lo exportan”, expresó.