El entorno de inseguridad en México ya alcanzó a empresas petroleras, que han sido víctimas de robos y amenazas, al grado de no permitirles realizar sus actividades.
En lo que va del año, dos petroleras han solicitado a la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) una prórroga para el desarrollo de sus trabajos por temas de inseguridad, mismas que se han otorgado.
Es el caso de Pantera Exploración y Producción, que solicitó una extensión de 160 días para cumplir con sus planes de evaluación en una zona de la Cuenca de Burgos, ubicada entre Reynosa y Río Bravo, en Tamaulipas.
Unos días después, la misma empresa pidió una prórroga de 90 días para otro proyecto en los municipios de Matamoros y Valle Hermoso.
La semana pasada, la petrolera rusa Lukoil solicitó una prórroga de cuatro meses para iniciar trabajos de exploración en un proyecto de aguas someras de Tabasco, también por temas de inseguridad.
En el caso de Pemex, a mediados de julio reportó un robo en equipos para la operación de cinco plataformas, cuyo valor estimado es de 2 millones de pesos.
Sergio Pimentel, socio de Agon y ex comisionado de la CNH, dijo que las denuncias corresponden a actividades en tierra y aguas someras de áreas ubicadas en sitios con altos niveles delictivos y los costos los asumen directamente las empresas.
“Lo que sucede es que en algunos estados hay actividad delictiva, desde bloqueos en los caminos que les impide al operador ingresar a donde están llevando a cabo la actividad petrolera, hasta casos en los que han levantado a algunas personas, y eso por desgracia tiene en varios estados; esto ocasiona retrasos en los calendarios de actividades de los operadores y lo que hacen es acudir al regulador para plantar los retrasos en la actividad por causas ajenas”, señaló.
La Asociación Mexicana de Hidrocarburos (Amexhi) dijo que las empresas están en coordinación con la Secretaría de Marina y de Seguridad para mejorar la vigilancia en aguas del Golfo de México.
Reforma