El ministro de Economía de Argentina, Luis Caputo, ha anunciado las diez primeras medidas económicas que llevarán a cabo. Según ha explicado, el objetivo del Gobierno de Javier Milei es reducir el déficit fiscal el causante de la alta inflación y la pobreza que padece el país.
“Si seguimos como estamos, vamos inevitablemente a una hiperinflación”, alertó Caputo. De hecho, también advirtió de que sería una “catástrofe” que se llegase a una tasa de inflación del 15.000 % anual. Por ello, ha explicado que uno de los principales problemas a los que se va a afrontar el Ejecutivo de Milei es la recuperación del equilibrio fiscal.
Entre las medidas más destacadas de este paquete de “urgencia” se encuentra la devaluación de la moneda en un 50%, la suspensión de la publicidad gubernamental en medios, reducción del número de ministerios y secretarías del Gobierno, recortar al mínimo las transferencias del Estado nacional a las provincias o la reducción de los subsidios de energía y transportes para evitar el riesgo de hiperinflación. Además, Caputo también ha confirmado que no se licitarán nuevas obras públicas ni se renovarán contratos laborales menores a un año en el Estado.
Con esta devaluación del 50% de la moneda argentina, el tipo de cambio oficial saltará de 400 pesos por dólar estadounidense a 800 pesos por unidad. Según el titular de Economía, este nuevo tipo de cambio oficial dará a los sectores productivos los “incentivos adecuados para aumentar su producción”, principalmente al sector exportador.
Con reservas monetarias en niveles críticos, el objetivo del Gobierno parece ser incentivar el ingreso de divisas por la vía de exportaciones.
En este escenario, anunció un aumento provisional de los impuestos a las importaciones y de los derechos de exportación de productos no agropecuarios.
Sin embargo, el Gobierno de Javier Milei no se ha pronunciado sobre las múltiples restricciones cambiarias que prometió levantar durante la campaña ni sobre cómo resolverá el problema de los pesados pasivos del Banco Central.