Un juez de Nueva York declaró a Donald Trump y a sus hijos mayores responsables de fraude, al señalar que proporcionaron estados financieros falsos durante aproximadamente una década.
El fallo del juez Arthur Engoron ocurre días antes de que la demanda civil por fraude, que interpuso la oficina de la fiscal general de Nueva York, llegara a la etapa de juicio.
Engoron aceptó la moción de la fiscal general Letitia James para dictar un juicio sumario, y consideró que Trump, sus hijos y otras personas “son responsables jurídicamente de violaciones persistentes” de la ley estatal de Nueva York. El juez también declaró que los estados financieros que los Trump proporcionaron a los prestamistas y aseguradoras durante aproximadamente una década eran falsos y que cometieron fraude repetidamente.
El expresidente reaccionó a la decisión judicial y afirmó en un comunicado que se trata de un ataque en su contra. Tras criticarlo, Trump aseguró que el juez está “cumpliendo las órdenes” de la fiscal Hames. “La acción de hoy es una refutación de mi condición como principal aspirante a ser presidente de Estados Unidos“, sostuvo. Y añadió que la Organización Trump “es una gran compañía que ha sido calumniada y difamada por esta cacería de brujas motivada políticamente”.
La decisión representa un golpe legal para Trump y rechaza totalmente sus argumentos de que no infló el valor de sus campos de golf, hoteles y casas en Mar-a-Lago y Seven Springs dentro de los estados financieros que se utilizaron repetidamente para hacer negocios.
La fiscal James pidió 250 millones de dólares en daños y perjuicios, así como la prohibición de que los Trump ejerzan cargos directivos de empresas en Nueva York y que su compañía no pueda realizar transacciones comerciales durante cinco años.
Entre otras cosas, a Trump se le acusa de inflar el valor de su apartamento triplex en la Torre Trump por tres veces su tamaño, lo que resultó en una sobrevaluación de entre 114 y 207 millones de dólares, escribió Engoron.
“Una discrepancia de esta magnitud por parte de un promotor inmobiliario que aumenta su propio espacio habitable durante décadas, únicamente puede considerarse fraude”, escribió Engoron.
“Lo que exacerba la conducta escandalosa de los acusados es su continua dependencia de argumentos falsos, en documentos y argumentos orales”, escribió Engoron. “En el mundo de los acusados los apartamentos con alquiler regulado valen lo mismo que los apartamentos no regulados; la tierra restringida vale lo mismo que la tierra no restringida; las restricciones pueden evaporarse en el aire, señaló el juez.
Y añadió: “Ese es un mundo de fantasía, no el mundo real”.
También comparó la defensa legal que hicieron los Trump de sus estados financieros fraudulentos con una frase de Chico Marx en la comedia “Duck Soup”: “Bueno, ¿a quién vas a creer, a mí o a tus propios ojos?”
El abogado de Trump, Christopher Kise, calificó el fallo como “completamente desconectado de los hechos y de la ley vigente”.
También explicó que “si bien el impacto total de la decisión aún no está claro, lo que sí está decidido es que el presidente Trump y su familia buscarán todos los recursos de apelación disponibles para rectificar este error judicial”.
En una declaración en X, la plataforma antes conocida como Twitter, Eric Trump dijo: “Hoy perdí toda fe en el sistema legal de Nueva York. Nunca antes había visto tanto odio hacia una persona por parte de un juez: un esfuerzo coordinado con la fiscal geneal para destruir la vida, la empresa y los logros de un hombre. Hemos dirigido una empresa excepcional: nunca hemos dejado de pagar un préstamo, hemos aportado a los bancos cientos de millones de dólares y hemos desarrollado algunos de los activos más emblemáticos del mundo. Sin embargo, hoy la persecución de nuestra familia continúa…”.
La fiscal James sostiene que Trump, tres de sus hijos, sus empresas y sus ejecutivos defraudaron a prestamistas, aseguradoras y otras entidades. (Un tribunal de apelaciones desestimó a la hija mayor de Trump, Ivanka, como coacusada en el caso en junio).
En la demanda, James afirma que Trump obtuvo un beneficio financiero “sustancial” al presentar información errónea en sus estados financieros, incluidos 150 millones de dólares en forma de tasas de interés favorables que obtuvo de los bancos que, según la fiscal, fueron engañados por el equipo de Trump.
En su fallo, el juez rechazó el testimonio de Trump en el que el expresidente dijo que los estados financieros no eran fraudulentos porque contenían descargos de responsabilidad. Trump dijo que las declaraciones contenían una “cláusula sin valor” que advertía a los prestamistas y a otros que no se debía confiar en ellas.
El martes, el juez dijo que “la confianza de los acusados en estas exenciones de responsabilidad ‘inútiles’ no tiene valor”.
El fallo significa que la oficina de la fiscal general ganó sus dos primeros demandas y recibirá una cierta cantidad de devolución que se determinará en el juicio. El caso aún procederá a la etapa juicio, pero los fiscales ya no necesitarán demostrar que los estados financieros son falsos, ya que buscan responsabilizarlo a él y a sus hijos por fraude de seguros y registros comerciales falsos.