La CIA desclasificó documentos sobre el fenómeno OVNI y ahora estos pueden ser descargados en formato PDF.
Miles de documentos sobre Objetos Voladores No Identificados (OVNI) que estaban en poder de la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA, por sus siglas en inglés) ya pueden ser consultados por el público en general.
Esto será posible gracias a la Ley de Libertad de Información, por lo que los datos sobre fenómenos aéreos no identificados podrán descargarse directamente del sitio Black Vault.
John Greenwald Jr., quien opera la plataforma, dio a conocer por medio de un comunicado que se investigará si hay documentos adicionales aún si descubrir que le pertenezcan a la CIA.
Las solicitudes de información relacionadas con el fenómeno OVNI llegaron a ser tantas que el organismo de inteligencia estadounidense finalmente las compiló en un CD-ROM.
Este artefacto fue obtenido por John Greenwald Jr., quien posteriormente lo subió todo a Black Vault como archivos PDF descargables. Desafortunadamente los documentos son difíciles de descifrar, situación que podría ser intencional según palabras del operador del sitio.
“La CIA ha hecho que sea increíblemente difícil usar sus registros de manera razonable (…) En mi opinión, este formato desactualizado hace que sea muy difícil para las personas ver los documentos y usarlos para cualquier propósito de investigación”, expresó en entrevista con Vice.
¿Qué información sobre el fenómeno OVNI se encuentra en los documentos liberados por la CIA?
Entre los datos más intrigantes se encuentra un documento que muestra el interés de un exsubdirector adjunto de ciencia y tecnología de la CIA por un objeto particular sin nombre.
“Decidió que lo investigaría personalmente y, después, dio consejos sobre cómo seguir adelante. Ese consejo es clasificado”, refirió John Greenwald Jr. desde la cuenta de Twitter de Black Vault.
Cabe recordar que el año pasado el Departamento de Defensa de los Estados Unidos desclasificó oficialmente los videos de un OVNI tomado por pilotos de la Marina.
Vice / The New York Post