Hoy se inició en el Zócalo de la CDMX la inigualable fiesta de nuestros pueblos originarios, la que se realiza con el propósito de hacer visibles a los habitantes indígenas de la Ciudad de México. ¿Por qué realizar una fiesta de este tipo? Los motivos son por la gran discriminación de la que son objeto por su origen étnico, el color de su piel y sus lenguas diferentes al castellano.
En torno a nuestros indígenas se crearon estereotipos que los presentan como naturalmente retrasados, pobres, tontos y flojos, la figura de la India María es un ejemplo nítido, ella era una gran actriz, muy ilustrada, pero en los programas de televisión y en sus películas la exponían siempre como muy pobre, aunque audaz e ingeniosa; ella filmó 25 películas y actuaba en varias series de televisión, pero en ellas siempre predominaban los intentos de “La India” por integrarse a la cultura mestiza moderna y el sólo nombre tenía una connotación racista y peyorativa, analice su conciencia, sea sincero y sincera consigo misma, ¿no ve a nuestros indígenas como inferiores?
¿Alguien recuerda la película Tizoc? con nuestros grandes artistas, Pedro Infante y María Félix que por ella se hicieron merecedores a premios internacionales y en la cual Pedro, frente a ella, una aristócrata citadina, era un indio sumiso, devoto y sufrido que ganó el premio al mejor actor en el Festival de Cine de Berlín; de manera que los medios de comunicación han sido reproductores fértiles del racismo y la discriminación que el país padece como una epidemia crónica, de esto hay infinitos ejemplos, no olvidemos que en el siglo XVI los españoles debatían sobre la humanidad o no de las poblaciones aborígenes de América.
Pero volviendo a la V fiesta de las culturas indígenas en la CDMX, están ahí al menos 29 grupos étnicos y como invitados, cuatro de la zona yumana de Baja California, tres de Guatemala y los ocho barrios del pueblo de Iztapalapa, ellos representan la diversidad cultural del país en el centro de lo que fue la gran Tenochtitlan, se busca subrayar que la Ciudad de México es también la Capital Indígena del país.
En esta fiesta, el eje temático será; Lenguas Indígenas y Movilidad Humana, ahí participarán más de mil expositores y se dará espacio a una magna exposición del arte indígena, con su riqueza textil, cerámica, gastronómica, lingüística, dancística, de poesía, juego de pelota y reflexión sobre la diversidad de sus problemáticas como la defensa de sus territorios y sus lenguas, de las que Octavio Paz expresó, “el triunfo de Marcos es el triunfo del lenguaje”; la hegemonía del castellano casi acaba con esa maravillosa diversidad lingüística que, a pesar de todo nuestras etnias han preservado y que debemos cuidar como un tesoro excelente que nos permiten acercarnos a las cosmovisiones originarias de nuestros ancestros, con sus valores comunitarios y su espiritualidad.
Aún no alcanzamos a vislumbrar lo que representa que en México al menos 7 millones de personas hablen alguna lengua indígena y 20 millones se identifiquen como pertenecientes a estas etnias.
El filósofo y científico León Portilla, galardonado con 17 doctorados Honoris Causa dijo recientemente, “la lengua es la Patria…la lengua de México son las lenguas indígenas, el español vino más tarde.
Celebro que los derechos de los indígenas como ciudadanos lleguen a ser plenamente reconocidos y que sus comunidades pueden desarrollarse de manera autónoma, libres de la pobreza, marginación y discriminación, estos festivales son sin duda una herramienta, pero no basta, hay que acelerar el paso, porque aún falta mucho para llegar a la igualdad y el respeto a los derechos humanos de nuestros pueblos originarios.