El sistema gubernamental creó un narco gobierno, igual que lo fue en Colombia en la época de los ochentas con Pablo Escobar, donde era el que ponía y quitaba personajes de la vida pública, desde el presidente, gobernadores , alcaldes, diputados y funcionarios públicos clave donde les cobraba el favor de haber puesto dinero en sus campañas.
Rosa Ofelia Garza De La Peña
Este mismo método estuvo incrustado en nuestro gobierno y el pueblo se hartó de todo esto, cuantos narco políticos tuvimos, montones, tejieron redes de complicidad para poder operar., en todas las dependencias gubernamentales que les sirviera para encubrirlos a cambio de una partida de dinero, desde jueces y magistrados. De ahí la fortuna de muchos que no compagina con los sueldos.
En Coahuila nos inundaron de criminales, en la época negra de Humberto Moreira de tal manera que hasta permitieron la masacre en venganza de personas del crimen organizado matando más de mil personas en un pueblo cercano a la ciudad fronteriza de Piedras Negras, Coah. Este pueblo se llama Allende de muy tristes recuerdos.
El gobierno de Coahuila cayo de rodillas ante los criminales. Nos tuvo secuestrados ya que nadie se sentía seguro en ningún lugar, los jóvenes vivieron los peores épocas de terror de ser levantados. Se reunían en casas de amigos, tenían prohibido ir a antros, una época muy oscura que vivió el Estado, vendió sin duda a Coahuila. En tiempo de Calderón y su fallida guerra contra el narcotrafico hubo muchos daños colaterales, muchos inocentes muertos a fuego cruzado entre los militares y la delincuencia.
Pésima estrategia porque fue como darle de palos al panal para que saliera el avispero, al verse atacados y mermados en personal y ganancias se dividieron así que hablando de algunos números sin ser ciertas estas cantidades si antes había cuatro grupos después de su mandato ya había diez, con otros líderes y otras formas de operar.
México tiene 9 de las ciudades más peligrosas del mundo de 50 pero se analizaron 186 estamos muy por encima de África donde después de tantas guerrillas y genocidios llegaron a la calma, como en Ruanda hasta que al fin llego un presidente a calmar las guerrillas provocadas entre Tutsis, los Hutus y otras tribus.
Así que en cuestiones de seguridad necesitamos muchas estrategias, seguirles las rutas del dinero a las cabezas de los líderes que operan estas organizaciones, pero también a quien está coludido con ellos de personajes políticos, ahí tenemos a Romero de Deschamps el principal líder de los huachicoleros manejado todo desde la torre de Pemex.
Sin duda ahí tenemos a las principales bandas de la organización criminal esa que opera desde el gobierno, que teje una increíble red de complicidad financiera como la nueva modalidad de crear empresas fantasmas para desviar millones de pesos a sus cuentas públicas.
En Coahuila se operó muy bien en esta modalidad desde Humberto Moreira, Jorge Torres que en un año de interinato saqueo junto a Héctor Javier Villarreal las arcas públicas.
En Coahuila como en muchos Estados estamos como ciudadanos esperando el funcionamiento de esta Guardia Nacional, Torreón sigue marcada como de las ciudades más violentas.
Los carteles se están acomodando por eso se volvió a disparar la violencia en las calles pero nada que ver cómo cuando Felipe de Jesús Calderon les declaró la guerra sin una verdadera estrategia, donde los daños colaterales no hubieran cobrado tantas vidas inocentes.
Las policías locales en su gran mayoría estaban bajo nóminas del crimen, así se apoderaron de ellas, los ciudadanos nuevamente sufrimos los embates de la inseguridad.
Por eso clamamos ese nuevo cuerpo policiaco, que seguramente vendrá hacer más trabajos de inteligencia, pero tampoco puede ser suave con la delincuencia, por la experiencia que vimos cuando la tragedia de Tlahuelipan Hidalgo, cuando los militares pedían no acercarse al ducto roto donde salía la gasolina a borbollones. Fueron agredidos y resulta que les querían reinvertir la responsabilidad.
Fue tanta la complicidad de los gobiernos pasados que ahora hay esperanza de este nuevo cuerpo de seguridad, donde también aprieten a miembros de las corporaciones que formó el PRI para tener aliados en las votaciones y les controlarán él área rural. Aquí en Coahuila aún siguen haciendo de las suyas, como Antorcha Campesina, la CNC, la CNOP corporativas asociaciones donde se agrupan algunos miembros para hacer despojos. Coahuila en seguridad está muy malherido.
Así que enhorabuena a esta nueva policía.