Si “Coahuila Digno” fuese una herencia tangible que pueden gastar los beneficiarios, está le tocaría en partes iguales a: Guillermo Anaya y al PAN, a Javier Guerrero y sus independientes, a Armando Guadiana y MORENA, a Luis Horacio Salinas Valdés y sus independientes, y hasta a José Ángel Pérez Hernández, aunque finalmente se sumara a MORENA.
Pero…(siempre hay uno), aunque subyace seguramente un coraje reprimido en la gente, ¿cómo cuantificarlo? ¿Es una rabia contenida y una impotencia desbordante, que son más grandes que el miedo y el conformismo? No se sabe si completan para destronar al PRI-Gobierno y a la familia criminal, culpables de nuestros males acumulados, tras 12 años y estos nefastos meses.
Aquella marcha histórica en Saltillo, de tantos coahuilenses decididos entonces a linchar al defraudador electoral, al malvado gobernante que roba al pueblo así como desfalcó a su gremio magisterial, fue una lección de vida democrática y civil,. Una lección tan poderosa, que retumba en las mentes y los corazones de los 100,000 que marcharon y de los cientos de miles que con ellos gritaron, y gritan: “Nos robaron dinero, votos, justicia y buen nombre, pero el alma pura de Coahuila, que es sagrada, por nuestra dignidad, permanece incólume”.
Premisa falsa
La herencia no se puede cobrar porque la dignidad de los coahuilenses no es moneda de cambio ni es ocasional. Quienes la usan en frases electoreras, son unos cínicos que creen que la gente es tonta y que sus sentimientos son explotables.
Ser la víctima del atraco electoral fabricado por Rubén Moreira, autorizado por Peña Nieto y validado por los árbitros y tribunales, es un duelo general. Ello, no hace de ninguna forma que el PAN o cualquier otro actor de aquella epopeya, goce de la simpatía automática y por ello, gane de gratis las elecciones del 1 de julio.
Si así lo sienten, si por ello actúan y si con esa base irreal hacen campaña, la derrota difícil puede llegar. Si señores, ganar es más sencillo que perder para el PAN (en esta circunstancia), pero los azules andan distraídos, de la greña y sin dinero. (Pregunten a Chilo y a Orta. Pregunten a Paredes, a Gerardo y a César. Pregunten a Ester y a Memo, pregunten a Héctor Horacio, a Yolanda Saucedo y a Saro. Pregunten…).
Y mientras tanto, en la calle compiten otros, como MORENA, que esperan que la ola poderosa que se ve en el horizonte, se junte con la rabia social, esperan que los arrastre a la meta y sean acompañados por muchos. Y compite el gobierno tricolor, esperando que, los del PAN y los de MORENA, se sigan matando entre sí, para en tanto, los mapaches desde el gobierno roben de nuevo la elección.
La lana electoral es básica
¿Dónde está el dinero de la campaña de gobernador, se gastó todo y además, hay deudas enormes; dónde están las prerrogativas de ahora, que no se ven por ningún lado; por qué, los candidatos a alcaldes y diputados federales, y hasta una a senadora, andan sin recursos?
¿El dinero como las candidaturas, las siguen controlando Guillermo Anaya, Luis Fernando Salazar y Bernardo González?
La dignidad
La dignidad de Coahuila no es negociable ni es electoral.
PD. Hoy hace campaña en Saltillo Ricardo Anaya Cortés, candidato de la Coalición Por México al Frente (PAN, PRD, MC). En el Parque Las Maravillas, al filo del mediodía.