Libre Comercio 2.

En la anterior entrega, referíamos la historia del comercio en nuestro país y su tímido asomo por primera ocasión al GATT y posteriormente al TLCAN.

Sin embargo, a la par de la firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, nuestro país fue cauto en formar parte de otros círculos de comercio que lo convirtieron en una época en el estado con más socios comerciales o al menos en la presunción. Los tratados con: el G3, Transpacífico, La Unión Europea, Israel, Triángulo del Norte, Chile, Venezuela, Paraguay, Uruguay y otros más, sintetizaron el esfuerzo para acceder a los esquemas libres de alcabalas.

En el inter, el TLC funcionaba en forma ventajosa para los socios comerciales, pero especialmente para nuestro país: simplemente mencionando que 108 millones de dólares por hora en mercancías, son intercambiados a través de las fronteras de los tres países; Que en los primeros 10 años las exportaciones mexicanas se habían triplicado de 52 millones a 161 millones de dólares y significó un crecimiento del 12% anual; Además, México abandonó el esquema de país proteccionista para pasar a un modelo de libre mercado y que millones de consumidores mexicanos han resultado beneficiados de tener al alcance una variedad de productos y servicios innovadores que son más baratos y de más calidad.

El TLCAN cumplió con creces en materia de comercio e inversión. En el caso agrario, las exportaciones aumentaron un 9.4% anual. Un ejemplo claro de todos los beneficios del TLCAN es el de los aguacates Hass de Michoacán que con el TLC logró superar décadas de proteccionismo estadounidense y enviar aguacates a EU.

La industria de autopartes en México creció en un 170% a partir del TLC, convirtiéndose no solo en un país de exportación de refacciones e implementos, sino de armadoras de vehículos.

Llegado del tiempo de la renovación del tratado, surgen las complicaciones ante el discurso agresivo de Trump y las promesas de campaña que hizo al pueblo de Norteamérica que desafortunadamente para nosotros, han estado cumpliéndose.

Trump basó su estrategia en 5 frases, que han abonado a la economía de Norteamérica y lo posicionan para asumir el papel de golpeador del tratado.

La primera: “Juntos, construiremos un Estados Unidos seguro, fuerte y orgulloso”. En su primer año de gobierno ha mantenido datos positivos de empleo, una de sus principales promesas de campaña. Superan los datos del primer año de sus antecesores con una tasa de desempleo de solamente 4.1%.

La segunda: “Este es nuestro Nuevo Momento Americano. Nunca ha habido un mejor momento para empezar a vivir el sueño Americano”. “A todos los ciudadanos esta noche, no importa dónde han estado o de dónde vengan, este es su momento. Si trabajan fuerte, creen en ustedes y en Estados Unidos, pueden soñar lo que sea y ser lo que quieran. Y juntos, podemos alcanzar cualquier cosa”. El discurso que se centró en el patriotismo, despertó al norteamericano tradicionalista y ahorrativo, que finalmente sostiene la estructura de ese país y los llevó a invertir en negocios en USA.

La tercera: “Finalmente, Estados Unidos le ha dado la vuelta a décadas de tratados comerciales injustos que han sacrificado nuestra prosperidad y llevado a nuestras empresas, nuestros empleos y nuestra riqueza fuera de nuestra nación”. En su primer año, Trump consiguió la reforma fiscal más grande en más de 30 años y sacó a Estados Unidos del Tratado Transpacífico (TPP).

La cuarta: “Estados Unidos es una nación de constructores. Construimos el Empire State en sólo un año, ¿no es una desgracia que ahora nos tome diez años en conseguir la aprobación de un simple camino?” Su plan de infraestructura, que busca ofrecer incentivos, programas de créditos y desarrollo de empleos para generar una inversión de $1.5 billones de dólares.

La quinta: “Las comunidades más débiles, especialmente los migrantes, también serán apoyados por políticas migratorias que se enfocan en los mejores intereses de los trabajadores y las familias norteamericanas”. Su reforma migratoria tiene 3 pilares: Ofrecer la ciudadanía a más de 1.8 millones de migrantes ilegales que llegaron cuando eran niños. Reforzar la frontera con un muro y Terminar con la lotería de visas que ofrece estatus migratorio sin fijarse en méritos, habilidades o seguridad para los ciudadanos norteamericanos.

A medida que el discurso de Trump, crece, la negociación del TLC se empantana y puede tomar en desventaja a nuestro país y su endeble economía. Haya Cosa.

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