No hay gobierno que no tenga funcionarios públicos a modo, Coahuila no es la excepción, aquí no importa si eres bueno o no lo eres, lo importante es si eres manipulable y ambicioso, si sabes repartir, si eres obediente a lo que te ordene tu superior.
Entonces sí te mereces el puesto. La honradez y rectitud no son elementos claves, esas cualidades salen sobrando es más estorban. También cuenta qué amistades tengas de políticos con compromiso o cuántos compromisos en campaña hayas generado, por eso en el tiempo de Humberto Moreira, todas las secretarías y direcciones estaban sobre saturadas de empleados.
Lo vemos también en la presidencia municipal de Ramos Arizpe Coahuila, en esta administración vigente, inventaron nueve direcciones más para cubrir compromisos generados tanto por Ricardo Flavio Aguirre expresidente municipal y padrino del que hoy ocupa esa presidencia, Chema Morales Padilla. Por eso el gasto corriente está elevado. Lo mismo sucede en la alcaldía de Saltillo con Manolo Jiménez, al fin sus compromisos de campaña los pagamos todos.
LO QUE HAY QUE LEGISLAR
Se necesita una regulación de funcionarios públicos que sí funcione para el puesto que fueron asignados, no se debe permitir que, por ejemplo: Un director de Obras Publicas sea licenciado en mercadotecnia, porque sabrá de obras públicas lo que nosotros sabemos de dirigir un cohete al espacio lanzado desde la base espacial de la NASA, o que un licenciado en derecho lo pongan en Desarrollo Rural, deben de tener el cargo acorde a su estudio o bien a su experiencia en el ramo.
Porque, para firmar oficios cualquier persona lo hace, al fin están atenidos a los asesores que es otro millonario desembolso para el gobierno de cualquier orden. En la presidencia de Ramos Arizpe Coahuila, sólo de asesores al año gastan alrededor de 9 millones de pesos y todo por tener gente inútil para el puesto, son puestos de compromiso al fin les resuelve su ignorancia en el ramo donde fueron asignados, la tesorería, pagándoles cuantos asesores necesiten.
Por cierto el asesor del jurídico en Ramos Arizpe, es nada menos que el despacho del hermano del ex alcalde Ramón Oceguera, el notario José Oceguera. Los mismos siguen cobrando en la nómina municipal, mes tras mes.
Debe haber por lo tanto una iniciativa de ley por el Congreso de Coahuila donde no se permita tanto pago de asesores externos, por eso los funcionarios deben estar elegidos según su experiencia en cada puesto público.
Manolo Jiménez el presidente municipal de Saltillo, Coahuila, es el que más asesores tiene cubriendo un gasto millonario mensualmente. Y si quiere ser gobernador alguien que necesita asesores para todo es que es inepto, además está reprobado en transparencia municipal (jamás me han dado respuesta a mis oficios y eso que tienen un término) ¿Se lo imaginan de gobernador? Si ahorita nos cuesta demasiado en gasto de imagen y del séquito de asesores, de gobernador no seguiría desplumando a los coahuilenses.
Y no para ahí, a veces contratan asesores para los asesores, al fin se va a gasto corriente. Sin duda tenemos crisis de funcionarios públicos ¿porque, qué harían sin el servicio millonario de asesorías? Serían tan inservibles como un billete de Pancho Pantera.
Y termino diciendo: “Ya chole con lo mismo de los mismos”.
Rosa Ofelia Garza de la Peña
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