El peso mexicano intensificó su caída frente al dólar y ayer por la noche cotizaba en su mayor nivel desde finales de 2022, a la par que las bolsas asiáticas se derrumbaban al inicio de semana, así como las criptomonedas, ante las preocupaciones sobre la situación económica en Estados Unidos y la postura restrictiva del Banco de Japón, que apunta a mayores alzas de tasas que seguirán fortaleciendo al yen.
Las tensiones geopolíticas en Oriente Medio también minaron el apetito por el riesgo por parte de los inversionistas, ya que Israel se prepara para un posible ataque de Irán y de milicias regionales.
De acuerdo con Bloomberg, el peso cotizaba anoche en 19.81 unidades, con una depreciación de 3.3 por ciento, pero en la jornada alcanzó a alcanzar 20.24 unidades.
Gabriela Siller, directora de análisis de Banco Base, señaló que la divisa mexicana se depreció fuertemente, ante la posibilidad que Estados Unidos caiga en recesión en el corto plazo, la expectativa que el Banco de Japón siga subiendo su tasa de interés y la aversión al riesgo sobre México. “El yen japonés está arrastrando al peso”, anotó en su cuenta de X.
“Con la inflación en camino de volver al objetivo del Comité de Mercado Abierto, del 2.0 por ciento y un debilitamiento perceptible en el mercado laboral que aumenta el riesgo de recesión, ahora esperamos que la Fed reduzca su rango objetivo para la tasa de fondos federales en 50 puntos básicos en la reunión del 18 de septiembre”, señaló Hay H. Bryson, economista en jefe de Wells Fargo.
El yen y el yuan subieron el lunes, mientras que la caída del peso mexicano se extendió a medida que los operadores continuaron deshaciendo las operaciones de carry trade de los mercados emergentes.
El peso cayó hasta un 2 por ciento frente a la divisa estadounidense en las operaciones asiáticas, extendiendo su pérdida a un tercer día consecutivo.
La caída se produjo cuando el yen subió más de un 1 por ciento, mientras que el yuan chino se fortaleció un 0.7 por ciento, dos monedas utilizadas para financiar la popular estrategia comercial.
“Los operadores han comenzado a preocuparse por el riesgo de recesión en Estados Unidos después de que la tasa de desempleo subiera al 4.3 por ciento en los últimos datos”, según Alvin Tan, jefe de estrategia de divisas asiáticas del Royal Bank of Canada en Singapur. Ese es un mal ambiente para los carry traders, añadió el especialista.
Desplome bursátil
Con el sentimiento de un ‘lunes negro’, el índice Nikkei 225, de la bolsa de valores de Japón, se desplomaba 13.1 por ciento, con la mayor caída en la historia en puntos, mientras que el Kospi de Corea perdía 8.5 por ciento, ambas suspendieron operaciones por unos minutos; el Weighted de Taiwán lo hacía en 8.4 por ciento, el Strait Times de Singapur caía 4.4 caída y el FTSE Bursa, de la bolsa de Malasia retrocedía 2.8 por ciento.
Los futuros de los índices de Wall Street operaban también con pérdidas, lo que apunta a una jornada negativa, principalmente en las acciones tecnológicas. Los futuros del Nasdaq caían 2.9 por ciento, los del Dow Jones un 0.8 por ciento, y los del S&P un 0.7 por ciento.
“Básicamente, estamos viendo un desapalancamiento masivo a medida que los inversores venden activos para financiar sus pérdidas”, dijo Kyle Rodda, analista de mercado sénior de Capital.Com. “Ahora hay muchas ventas de pánico, que es lo que provoca estas reacciones no lineales en los precios de los activos a dinámicas fundamentales bastante sencillas”.
Bitcoin, en picada
Las criptomonedas también reportaban fuertes pérdidas, y en el caso del bitcoin, eran de 10.6 por ciento, mientras que ethereum retrocedía 18.8 por ciento, cardano 15.1 y solana un 11.3 por ciento.
Los activos digitales son víctimas en parte de la desinversión del carry trade del yen, a medida que los especuladores se ajustan a las tasas de interés más altas en Japón, según Hayden Hughes , jefe de inversiones en criptomonedas de la oficina familiar Evergreen Growth.