El gobernador electo de Coahuila, Manolo Jiménez Salinas, reconoció que la deuda pública será un reto financiero importante en su gestión “que habrá que atender y encauzar”, para lo que espera contar con el apoyo de la sociedad civil en el Consejo Ciudadano de Viabilidad Financiera, con el cual se buscará establecer un plan de acción en este rubro.
Señaló que el tema ya se aborda en las mesas de diagnóstico que se integraron como parte del proceso de transición, en las que se hace una revisión de las condiciones y el estado que guardan distintos rubros de la Administración, para después definir algunas acciones a seguir en el programa de los primeros 100 días y en el Plan Estatal de Desarrollo.
Jiménez Salinas, quien asumirá el Gobierno de Coahuila el 1 de diciembre de este año, consideró positivo que el Congreso del Estado haya aprobado la renegociación de la deuda, aunque, de entrada, se prevé iniciar con medidas de disciplina y austeridad, “cerrando llaves donde sea posible”, sin afectar el desarrollo de la entidad, atendiendo los programas y obras que se requieren.
Además del aspecto financiero, otras mesas de diagnóstico ya revisan rubros como la seguridad, el cual es prioritario, así como el de educación y el campo.
En dichas mesas de diagnóstico hay funcionarios del Gobierno estatal en funciones y el equipo del gobernador electo, donde “se revisa lo que hay que conservar, mejorar y lo que se debe cambiar”, indicó Jiménez Salinas.
Señaló que en septiembre próximo, empezará una revisión de los organigramas en las diferentes áreas de la Administración, para valorar los perfiles e integrar un gabinete profesional y preparado para atender las necesidades de los coahuilenses.
En ello, el gobernador electo aseguró que su gobierno será plural puesto que integrará a personajes que forman parte de la coalición de partidos PRI, PAN y PRD, que lo llevó al triunfo electoral el pasado 4 de junio, con quienes dijo existe muy buena relación y se han integrado a las giras de agradecimiento por todo el estado.
El Siglo de Torreón