Las autoridades israelíes ordenaron este viernes 20 de octubre la evacuación de los residentes de la ciudad de Kiryat Shemona, ubicada a unos 10 kilómetros de la frontera con Líbano, donde se han producido intensos intercambios de fuego en la última semana con el grupo terrorista chiita Hezbolá y otras milicias. La urbe cuenta con unos 25.000 habitantes.
“La Autoridad Nacional de Gestión de Emergencias (NEMA) del Ministerio de Defensa y las Fuerzas de Defensa de Israel anuncian la evacuación de los residentes de la ciudad norteña de Kiryat Shemona a casas de huéspedes subsidiadas por el Estado”, informó un comunicado conjunto de ambas instituciones.
“Hace instantes, el mando del norte informó al alcalde de la ciudad sobre la decisión. El plan será llevado adelante por la autoridad local, el ministerio de Turismo y el ministerio de Defensa”, dijo el ejército israelí en un comunicado. El ministro de Defensa, Yoav Gallant, aprobó la medida, que busca garantizar la seguridad de los ciudadanos en una región expuesta a ataques.
El jueves, el grupo terrorista Hezbolá reivindicó un lanzamiento de misiles antitanque y varios ataques contra objetivos militares israelíes, mientras que las Brigadas de Al Qasam, brazo armado del grupo terrorista Hamás -con las que Israel se enfrenta en Gaza desde hace dos semanas, tras un ataque contra civiles en su territorio-, se atribuyeron el disparo de una treintena de cohetes desde el sur de Líbano.
Ese lanzamiento de cohetes desde Líbano dejó en Kiryat Shemona tres heridos este jueves. Ya el lunes Israel había evacuado unas 28 comunidades situadas a menos de dos kilómetros de la frontera con Líbano, que vive momentos de fuerte tensión, los mayores desde la guerra de 2006 que libró el Ejército israelí contra Hezbolá, y cuyas hostilidades se reanudaron al día siguiente de que comenzara el conflicto en Gaza con Hamás y las milicias de la Franja.
Desde el 7 de octubre, los enfrentamientos en la frontera entre Israel y Líbano han causado la muerte de una veintena de personas, en su mayoría combatientes, pero también un periodista de la agencia Reuters y dos civiles. Del lado israelí, al menos tres personas han muerto.