Los recuerdos son historia, quien no tiene claro de donde viene, está condenado a regresar al mismo punto que aborrecía al empezar su marcha pero, mas viejo, mas débil y mas tonto.
Para alcanzar un sueño por lejano que parezca, es indispensable retener experiencias, analizarlas y aprender; esto último implica vivir, entender y recordar, cuando así lo hacemos las cosas de nuestro pasado se graban profundamente en nuestra esencia, transforman el disco duro que tenemos en el interior al cual llamamos subconsciente y modifican todo lo que vivimos, porque ese cumulo de datos están fuertemente presentes en nuestra vida cuando estamos consientes y programan todos nuestros actos, nos generan impulsos y hacen que cada milímetro de nuestra persona espere eventos antes de que estos se presenten, algunos le llamamos a eso intuición.
Como las bestias, los hombres guardamos en el subconsciente información trascendental de acuerdo a nuestras sensaciones, cuando nos lastima el frío repetidamente, nos hacemos compulsivos con los abrigos; cuando nos golpeamos en el dintel de una puerta varias veces, nos agachamos hasta en la puerta de una catedral y como dice el conocido refrán, si nos quemamos con leche, hasta a el jocoque le soplamos.
Es sorprendente que algunos de los que ya estamos de bajada en el camino de la vida, quiero decir mas allá de los 40 años, no obstante que conocemos perfectamente los distintos estilos de gobernar que se aplican en un sistema de partidos como el nuestro, todavía dudemos sobre lo que podemos esperar de las instituciones que repiten mas de una vez en el ciclo del poder, cuando se trata de grupos heterogéneos el resultado es corrupción y cacicazgo, pero cuando estos grupos se reducen a familiares, el resultado puede ser mas grabe y subir en la escala del mal hasta transformarse en dictadura; y si el destino del poder permanece en un solo individuo, entonces el riesgo se pierde, pues la palabra riesgo implica una dualidad de opciones, donde una puede ser mala, pero la tradicional es buena, sin embargo en el gobierno de uno, el mal es inminente, los daños pueden ser irreparables y el resultado es sin duda la catástrofe.
Un tirano no solo es así porque tenga la consigna de desayunar carne humana, acostarse con infantes o empalar a sus enemigos, en la modernidad un tirano obliga a todos sus vasallos a vivir en la pobreza endeudándolos de manera criminal y vergonzosa, permite y soporta la criminalidad evitando que la justicia tome lugar y en casos peores, formando parte del hampa y participando de sus utilidades.
En nuestro país es evidente que en la medida en que un bandido soporta aun truhan, este lo protege y se aposta a su favor, tanto como el nefasto aporta para la asunción del usurpador, tanto como el usurpador invierte en blindar al nefasto.
En México el partido en el poder desde el inicio de su mandato persiguió y encarceló a ex mandatarios emanados de sus propias filas, el movimiento parecía afianzador y lavaba la cara del sujeto en el poder, hoy de nueva cuenta se acusa con índice de fuego a otros similares al que gobernó Tabasco, aparentemente el gobierno hoy desgastado y lo subrayo porque la palabra no deja de recordarme la última campaña presidencial, sigue sin tocar e incluso defiende con el poco capital político que aún conserva a alguien en especial.
Hoy y en adelante ¡Recuerda! porque solo con memoria actuaras con conciencia y si sientes escozor al momento de cruzar algunas siglas en especial, ten presente que es tu instinto el que te alerta, ¡Escúchate! y piensa en una mejor opción.
¡Que Dios Nos Bendiga!
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