Desde que se declaró la pandemia del COVID-19 en marzo, México ha registrado más de 260 mil pacientes de coronavirus, siendo el cuarto país latinoamericano con más casos activos luego de Brasil, Perú y Chile, según reporta la Universidad de Johns Hopkins.
Conversamos con el ex director de salud de México, José Narro, sobre cómo evalúa la situación en el país. “Al gobierno de México le ha hecho falta previsión, preparación, formación y el liderazgo que se requiere para poder conducir la enfermedad, hay un déficit en el manejo de la gestión de la epidemia“, dijo el ex secretario sobre la gestión del presidente Andrés Manuel López Obrador para afrontar la pandemia.
También, el médico y epidemiólogo, considera que la reapertura económica se realizó muy temprano en México. “Se debe hacer una valoración pertinente de cuándo es el momento adecuado para abrir una economía. Las aperturas deben hacerse cuando la epidemia está en descenso, en México se hizo a partir del primero de junio cuando todavía estábamos en la etapa de ascenso, y eso que no hemos alcanzado el pico todavía“, explicó Narro.
Por otro lado, informó que desde el comienzo de la pandemia los datos no han sido los reales y ha habido opacidad a la hora de publicar el número de casos. “Somos uno de los países que realiza menos pruebas por cada 100 mil habitantes”.
El sub secretario de salud de México dijo que la cifra actual de casos hay que multiplicarlo por 8 y hasta por 30 para saber la cantidad real de contagiados”, contó el experto. “Se requiere información para saber cómo se va comportando una pandemia y la información que hemos tenido ha sido incompleta“. Sin embargo, el médico considera que debido a que muchos pacientes son asintomáticos, el conteo de los casos ha sido un problema en todas partes del mundo.
Otro error mencionado por el experto que se ha realizado en la gestión mexicana frente a la pandemia, fue la falta de preparación y de equipos sanitarios para el personal de salud. “Somos uno de los países con mayor cantidad de contagiados en el personal de salud”, dijo Narro.
Algunos críticos de la gestión del presidente Enrique Peña Nieto, en la que participó Narro como secretario de salud, argumentan que más de 300 hospitales fueron abandonados, y por lo tanto, hay más riesgo de colapso en el sistema hospitalario. Sin embargo, el ex secretario aseguró que el sistema hospitalario de México es robusto ya que se ha construido durante muchos años. “Hasta ahora hemos tenido la capacidad de responder por los pacientes. México tiene una infraestructura hospitalaria importante. Todavía hay capacidad para atender pacientes”, dijo el médico.
El experto sugiere que para controlar la pandemia se debe mejorar el uso del cubrebocas en toda la población y considera que debe ser obligatorio. “La evidencia sugiere que este es el mejor método para evitar la propagación del virus“, agregó. Por otro lado, recomienda a que los gobiernos mejoren su sistema de detección del COVID-19.
Ante la creciente subida de casos en la región latinoamericana, Narro cree que lo peor está por llegar. Sin embargo, se considera optimista. “Yo siempre soy optimista, pienso que los problemas son oportunidades y desafíos para ir mejorando. Pero tenemos que tener la actitud de afrontar la realidad ya que negando la situación, no se logra nada”, finalizó.
El Tiempo Latino