Salen los trapitos…
Entre más le rascan al asunto, más mugre sale a flote, al menos es lo que está sucediendo con los 127 millones de pesos que el Tribunal Superior de Justicia de Coahuila, por lo pronto los trae perdidos al ser invertidos y, por ahora, desaparecidos en la fraudulenta sociedad financiera FICREA.
Mi Columna
Salen los trapitos…
Por: Carlos Robles Nava
Entre más le rascan al asunto, más mugre sale a flote, al menos es lo que está sucediendo con los 127 millones de pesos que el Tribunal Superior de Justicia de Coahuila, por lo pronto los trae perdidos al ser invertidos y, por ahora, desaparecidos en la fraudulenta sociedad financiera FICREA.
Originalmente y en opinión de Armando Plata Sandoval, titular de la Auditoria Superior del Estado, no había delito que perseguir al menos por cuanto hace al ya ex Presidente de esa institución estatal encargada de impartir justicia, Gregorio Pérez Mata.
Supuestamente para la citada Auditoria, encargada al menos en teoría de vigilar la transparencia de los recursos públicos y de acuerdo con lo dicho con el ex Pérez Mata, el contrato con FICREA, para ganar intereses fue firmado por el entonces Oficial Mayor, el joven licenciado Héctor Armando Alvear Alvarado, que en “castigo”, el mismo Gregorio Pérez Mata, lo asigno como representante de la Justicia de Coahuila, ante el organismo internacional que aporta los recursos económicos para implementar el sistema de juicios orales, al menos es un secreto a voces esa situación en el interior del edificio de dicho Tribunal.
Lo anterior, pese a que entre los Magistrados del T.S.J., hay la información de que el contrato lo firmó directamente su entonces Presidente, Pérez Mata y no Alvear Alvarado.
La novedad en esta irregular situación es que la recién designada nueva Presidenta del T.S.J., licenciada Mirian Cárdenas, es que los intereses producto de los 127 millones de pesos, se “invirtieron” en compensaciones al personal del propio Juzgado, aunque no se dice a qué nivel, sino sólo y meramente entre los Magistrado o si se incluyó a otros trabajadores de niveles intermedios y bajos.
Precisamente los 127 millones de pesos, corresponden al llamado Fondo para el Mejoramiento dela Administración de la Justicia y que hablando en español, son dineros depósitos como fianzas en efectivo para gozar de libertad bajo caución reos cuyo proceso está en desarrollo, empero, una vez que se resuelvan su expediente o dicte la sentencia definitiva, tienen todo su derecho de reclamar la devolución del dinero entregado a dicho fondo.
Ahí estará la lid del asunto, pues nunca se habla de esta posibilidad y sobre todo cómo se responderá a quienes depositaron fianzas en efectivo cuando se dé un dictamen sobre su proceso y pidan la devolución de su dinero.
Como diría el Gober, Rubén Moreira, entre más le rascan, sale más pus, además de que son sucesos que hacen más pesada la carga al gobernante, siendo lo peor que se defrauda la confianza depositada entre la gente que supuestamente son sus más cercanos colaboradores. (www.intersip.org)