Esta semana abordaremos varios temas que nuestros lectores y consultantes nos han estado sugiriendo y que deseamos abordar en espera de que la información de hoy en forma de miscelánea sea de su utilidad.
Para iniciar vamos a comentar que el pasado jueves, la secretaría de gobernación del gobierno federal, Olga Sánchez Cordero, en entrevista radiofónica con Leonardo Curzio, fue interrogada acerca de la campaña de prevención contra las adicciones que termina con la frase: “con las drogas no hay final feliz”.
La ministra en retiro respondió que esta campaña del gobierno de la república, si bien puede parecer fuerte en sus contenidos y en su lema, es necesaria como un esfuerzo articulado de prevención contra el consumo de drogas que tanto está lacerando a nuestra sociedad, particularmente con el surgimiento de nuevas sustancias sintéticas de fácil accesibilidad y bajos precios.
Sánchez Cordero también reafirmó su postura a favor de la desregulación del cannabis sobre todo en uso medicinal y en otras aplicaciones del cáñamo, además de defender la libre determinación de la persona en su uso lúdico, debate que seguramente continuará en los próximos meses.
Sobre la campaña, como especialista en adicciones convencido de la importancia de la prevención y con el conocimiento de que esta es una etapa más de los esfuerzos vertebrados de varias instituciones del gobierno de México, que iniciaron con el programa integral “Juntos por la Paz”, me parece que los mensajes tienen un enfoque atinado para ilustrar el gran daño que causa el consumo de drogas.
Esta campaña está acompañada de muchas más acciones encabezadas por la Comisión Nacional contra las Adicciones con un abordaje diferente al que se había intentado en el pasado, por lo que estos mensajes en medios masivos deben analizarse a la luz de todos los programas que se emprenden institucionalmente en este asunto desde el enfoque de la salud pública.
En días pasados me llamó alguien que me recomendó a un prospecto de consultante para compartirme que lamentablemente por complicaciones de salud había fallecido este joven de 30 años, policonsumidor de cocaína y éxtasis entre otras sustancias, a quien sólo tuve oportunidad de ver de forma virtual en una ocasión y que expresaba su deseo de dejar las drogas y cambiar de vida.
Esto me hice recordar que desafortunadamente en el tiempo en que llevo trabajando de cerca con adictos y su recuperación, por lo menos otras tres personas cercanas perdieron la vida, además de otros muchos más que he conocido de forma indirecta o en algún grupo, lo que nos traslada a esos momentos dolorosos en que la familia tiene que despedirse súbitamente de su enfermo que simplemente no tuvo un final feliz, como tuvo dice la campaña.
“Eso es lo que debería decirse a los adictos en las pláticas”, me sugirió alguien cuando le contaba sobre lo que dijo la secretaria de la campaña y mi historia con la muerte de adictos cercanos.
Así que los mensajes en cuestión en lo personal nos parecen asertivos para transmitir con toda claridad los riesgos del consumo, como ya se dijo, acompañados de otras acciones integrales de prevención sobre uso, abuso y adicción de sustancias.
Los miedos en la codependencia
En un segundo tema de esta semana, respondemos la petición de una de nuestras seguidoras de las transmisiones por redes sociales de “La Alegría de Vivir sin Adicciones”, en la que no solicitaba hablar de los miedos en la codependencia.
Por obviedad del espacio limitado y a reserva de abundar en alguna próxima transmisión vamos a enumerar los miedos principales que la experiencia clínica nos permite agrupar.
A lo largo de decenas de casos de codependencia, hemos podido percibir que los miedos principales a los que se enfrentan en su proceso de recuperación son, el de hacerse cargo de sí mismos y tomar las riendas de su vida; tomar decisiones desde las domésticas y cotidianas, hasta aquellas trascendentes para su persona; sentir que el salir de la zona de confort del círculo de la codependencia será imposible porque no podrán poner límites en sus relaciones y terminarán cediendo a la forma en que siempre han vivido por más sufrimiento que les cause; iniciar una nueva forma de vida con amor propio centrada en su persona; desapegarse de la o las otras personas del sistema patológico y, perder el control del otro (de la otra).
La fuerza de voluntad para no reincidir
Uno de los temas recurrentes en el tratamiento es sobre la posibilidad de recaer, que otro de nuestros seguidores en redes pidió abordar como la fuerza de voluntad para no reincidir.
En el enfoque que nos parece que funciona mejor preferimos sustituir la llamada fuerza de voluntad por la buena voluntad, ya que la primera podemos asociarla con el ego de la persona, mientras que la segunda puede ligarse mejor a la humildad de seguir recomendaciones, indicaciones y un tratamiento.
Como tal, no creemos que la fuerza de voluntad sea un elemento para la recuperación si recordamos que las adicciones son superiores a la misma, al tratarse de una enfermedad del cerebro que requiere de un tratamiento indicado.
Por ello, además de la buena voluntad que mencionamos, lo recomendable es tener un plan de prevención de recaídas lo más integral posible, que incluya médico psiquiatra cuando sea necesario, terapia individual, grupo de ayuda mutua, grupo terapéutico, padrino o consejero y, guía espiritual, con lo cual se le darán al adicto las bases para ser un caso probable de éxito y que después del periodo de abstinencia temprana no engrosen las estadísticas de los que han recaído.
Día de gratitud
Además de agradecer a quienes en semanas anteriores nos han mandado sus recomendaciones para cambiar el régimen alimenticio y así ayudarnos en las enfermedades autoinmunes como la fibromialgia, deseamos dar gracias hoy por un nuevo año de vida y nuestra gratitud para quienes nos han enviado algún mensaje con ese motivo.
Un tema en el que nos habremos de documentar más para próximo artículo y que probaremos nosotros mismos es el de la combinación de la dieta mediterránea con una libre de gluten como alternativa para el padecimiento referido, además de los otros enfoques alternativos que mencionamos la semana pasada en nuestra entrega “Sanación Holística”.
https://www.milenio.com/opinion/omar-cervantes/la-alegria-de-vivir/miscelanea
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