Las reliquias soberbias en el suelo,
ni aquel famoso templo por quien delo
vivirá siempre en cuanto el mar encierra,
ni todos los honores que en la tierra
pueden de gloria alzarse en alto vuelo,
os dieran tanto honor, héroes del cielo,
cuanto os dan estas piedras y esta tierra.
De huesos de enemigos mayor pira,
do los vuestros a guisa de trofeo
se muestran fabricando, fabricaste.
El templo que a los otros más admira,
y el honor muy más grande que el deseo,
cristo os lo dio y vosotros lo ganaste.