Ofrece áreas a precios accesibles a través de una ‘asociación civil’; son predios irregulares.
Los “lotes campestres” que ofrece desde 2016 a través de internet una persona de nombre Eloy Constante de la Rosa, no parecen lotes y mucho menos campestres.
Son unos terrenos donde abunda el polvo y la maleza, sin servicios, con caminos de tierra trazados al paso de los vehículos y al costado de dos arroyos.
Cuando se vendieron se ofrecieron a un precio muy accesible y con facilidades de pago. Como suele suceder, era una oferta muy atractiva para quien no tiene posibilidad de conseguir un crédito bancario o con Infonavit.
Constante de la Rosa es un egresado del Tec Saltillo, y es el encargado del negocio denominado Ferretera y Materiales Guxmán, ubicada en la Calzada Madero, al poniente de la ciudad. Recientemente, el negocio cambió de razón social, y ahora se llama Ferretera y Materiales De la Rosa.
Pero el verdadero dueño del negocio es Jesús Guxmán Ruiz, actual director de Obras Públicas y Catastro del Municipio de General Cepeda, que preside su amigo personal, el alcalde panista Juan Salas Aguirre.
La venta de los lotes se hizo con la representación de la Asociación Coahuila, A.C., creada por Guxmán en 2013 y cuyo registro no aparece en el listado de asociaciones civiles reconocidas por el Gobierno. No cuenta con oficinas físicas.
La única prueba palpable de que existe esta “asociación” es su página de Facebook, creada en 2014.
Ha servido como plataforma política de Guxmán en General Cepeda, y en sus publicaciones aparecen prominentes panistas locales como el saltillense Carlos Orta Canales, y el lagunero Guillermo Anaya Llamas, quienes aparecen conviviendo con Guxmán en esas fotografías.
Terrenos no regularizados
Ha sido a través de esta misma página que se ha promovido la venta de terrenos, como los 703 lotes del fraccionamiento Los Mezquites, al poniente de Saltillo, que de acuerdo con las autoridades, no cuentan con los permisos tramitados de uso de suelo ni de Protección Civil al encontrarse entre dos arroyos.
Algunos de los compradores buscaron tramitar un certificado de libertad de gravamen, y se dieron cuenta de que no son terrenos regularizados.
Registro Público
Una búsqueda exhaustiva en el Registro Público de la Propiedad y una solicitud de información a la Dirección de Catastro Municipal, confirman que los terrenos que vendieron Guxmán y Constante pertenecen al predio conocido como La Quebrada.
Este polígono se dividió en dos partes, una vendida a Davisa Desarrollos Inmobiliarios, y otra cuyos propietarios legales, al menos en el papel, siguen siendo Jesús Cabello Gallegos y Juan Cabello Cabello.
Los contratos de la compra-venta de los terrenos con las decenas de personas que se acercaron a hacer esta supuesta transacción entre 2015 y 2016, se hicieron de la manera más sencilla: se les entregó un machote en el que aparecen los nombres de Jesús Guxmán, la Asociación Coahuila, A.C., y los de los compradores.
Algunos, no todos, tienen el sello de la Notaria No. 15 de Saltillo, de Raúl López Gutiérrez, quien también ha enfrentado los reclamos de algunos clientes. El notario se defiende diciendo que él solamente validó las firmas de los documentos y no la legalidad de la posesión de los terrenos por parte del vendedor.
Muchos de estos clientes fueron citados para la firma de documentos y el pago de los enganches y las mensualidades en la Ferretera Guxmán, que en su exterior aún hoy en día exhibe un anuncio de venta de terrenos.
Se trató de localizar a Guxmán Ruiz en sus oficinas en la Presidencia Municipal de General Cepeda, sin embargo, se dijo que no se encontraba en ese lugar. Tampoco respondió a los mensajes de WhatsApp que se le enviaron solicitando una entrevista sobre el tema.
Se buscó entonces a Eloy Constante en la Ferretera Guxmán, quien se negó a dar una entrevista, pero admitió de mala manera que no hay oficinas de la Asociación Coahuila.
Zócalo