Etiquetado “Product of USA” sería discriminatorio y costoso
La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) reiteró su decepción ante el anuncio por parte del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés), en torno a la regla final de etiquetado voluntario “Product of USA” o “Producto de EUA” para productos cárnicos, avícolas y de huevo.
De acuerdo con este anuncio, la regla final de etiquetado voluntario permitirá se aplique, única y exclusivamente, a productos cárnicos, avícolas y de huevo cuando derivan de animales nacidos, criados, sacrificados y procesados en Estados Unidos. Anteriormente, los comercializadores de carne estadounidenses podían usar el etiquetado “Product of USA”, si al menos uno de los procesamientos se lleva a cabo en territorio estadounidense y está sujeto a las inspecciones establecidas por el FSIS.
“La regla final de etiquetado voluntario “Product of USA” abre el espacio para incentivos de retroceso e inconsistencia con las obligaciones de la Organización Mundial del Comercio (OMC) para cumplir con el fallo en el caso de etiquetado-de-país-de-origen (COOL) en productos cárnicos, de las cuales México se reserva sus derechos. La Sader brindará los elementos necesarios a las secretarías de Economía y de Relaciones Exteriores para seguir integrando la mejor defensa de los intereses comerciales de nuestro sector agroalimentario”, detalló la dependencia en un comunicado.
En 2023, el valor de las exportaciones mexicanas de ganado bovino en pie y carne de res y sus derivados a Estados Unidos ascendió a 3,000 millones de dólares, incluyendo 1.25 millones de cabezas de ganado y 260,000 toneladas de carne de res y productos derivados.
México se mantiene como uno de los principales abastecedores de carne y productos de res y cerdo a Estados Unidos. Actualmente, nuestro país, es el segundo proveedor de carne de res y productos derivados de EE.UU., representando el 20% de las importaciones totales estadounidenses.
La Confederación Nacional de Organizaciones Ganaderas (CNOG) sostuvo que el etiquetado de cárnicos “Product of USA” es “discriminatorio”, por lo que pidió al gobierno mexicano demostrar a su contraparte de Estados Unidos que la medida afectará el comercio de ganado.
El organismo privado que representa más de 700,000 ganaderos agremiados de todas las especies pecuarias, afirmó que la medida es “injusta, discriminatoria e injustificada”, en especial para el mercado de ganado y carne de res de América del Norte, que está integrado y es referente para la seguridad alimentaria mundial.
Fernando Mayer De Leeuw, jefe de Asuntos Económicos Confederación Nacional de Organizaciones Ganaderas (CNOG), afirmó que el etiquetado Product of USA aumentará 80 dólares cada becerro vivo que vaya de México a Estados Unidos, lo que afectará a los productores mexicanos.
“El etiquetado ya pasó, ya que hubo un etiquetado obligatorio que duró de 2009 al 2015 y aproximadamente 80 dólares por cabeza subía de precio de los becerros (de 90 o 136 kilos), que cruzaban de México a Estados Unidos”, dijo el economista.
Por la segregación de ganado aumentaba 80 dólares por cada becerro exportado de México a Estados Unidos, el cual estaba justificado en las facturas de los vendedores, comentó.
Extienden bloqueo de ley antiinmigrante
La crisis migratoria de la frontera sur continúa siendo un problema en la Unión Americana, especialmente, en los estados colindantes, como Texas. Ante la falta de regulaciones a nivel federal, el estado de la Estrella Solitaria ha optado por implementar sus propias medidas. En un intento por frenar el flujo de migrantes entre Texas y México, el gobernador Greg Abbott aprobó la ley SB4, una de las medidas más contundentes contra la comunidad migrante.
A través de esta, se les brinda el poder a las autoridades locales y estatales de arrestar a los inmigrantes indocumentados, y sospechosos, que intenten cruzar por la frontera sur del país. Al hacerlo, pueden procesarlos por “delitos menores”, sin la autorización previa del gobierno federal, quitándoles su derecho a un juicio justo. Actualmente, los gobiernos estatales y locales están obligados a pedir permiso al gobierno federal para realizar el arresto de inmigrantes sin documentos.
Además del arresto sin autorización, los inmigrantes indocumentados que sean detenidos podrían presentar cargos por delitos graves de primer grado, por los que enfrentarían una pena de entre 180 días y cinco años en prisión, según su historial delictivo. Si los inmigrantes se niegan al arresto, la condena podría aumentar a delito grave de segundo grado, con una pena de entre 2 a 20 años.
Dado que esta nueva medida se salta al gobierno federal y viola los derechos de los inmigrantes, la ley ha provocado un sinfín de críticas, lo que la llevó a una evaluación ante el máximo tribunal del país: la Corte Suprema. De acuerdo con la resolución presentada el 4 de marzo, el organismo ha tomado la decisión de bloquear la legislación de manera temporal.
La intervención de la Corte Suprema llega luego de un llamado de emergencia por parte del Departamento de Justicia, quien argumentó que la ley “alteraría profundamente el status quo que ha existido entre Estados Unidos y los estados en el contexto de inmigración durante casi 150 años”.
En un inicio, la ley SB4 estaba programada para entrar en vigor el sábado, 9 de marzo. No obstante, la Corte Suprema bloqueó la decisión del estado. En primera instancia, el bloqueo estaba vigente hasta el 13 de marzo, sin embargo, el máximo tribunal optó por extenderlo hasta el 18 de marzo, a las 5:00 p.m. Si la Corte no toma una decisión para ese entonces, la ley SB4 podría entrar en vigor sin problema, gracias a la autorización de la corte federal de apelaciones de Texas.
Forbes/ElEconomista/AS