Son fechas propicias para la reflexión; la mía se da en medio del sentimiento encontrado: por un lado, tristeza y decepción por el fraude consumado en Coahuila; por el otro la alegría y el optimismo ante lo que está por venir. Para ambos casos el eje de mi reflexión es la búsqueda de la prosperidad para todos. Vivimos en un México complejo en el que los ciudadanos han mostrado, de diversas maneras, su hartazgo.
La desconfianza hacia las instituciones no es la excepción sino la norma. Atravesamos, además, por un periodo en el que el gobierno federal destaca en el mundo por su corrupción y su ineptitud.
Entiendo las razones de la desesperanza de muchos. También, comprendo por qué algunos creen que la solución a todos los problemas llegará por la vía de un mesías. Sin embargo, estoy convencido de que las soluciones mágicas y los productos milagro son una estafa. Nadie que se presente a sí mismo como la solución es de fiar. La razón es muy sencilla: los problemas que efectivamente tiene nuestro país son demasiado grandes y complicados como para que todo dependa de un líder único y supremo.
En cambio, estoy muy convencido de que un grupo amplio de mexicanos verdaderamente comprometidos puede transformar al país. Y aunque para efectos legales e institucionales tiene que aparecer una figura como aspirante a la Presidencia, sé que una de las grandes virtudes de quien encabece esa candidatura, tendrá la enorme capacidad para trabajar en equipo y para sumar esfuerzos.
Hoy quienes hemos decidido sumarnos en Por México al Frente provenimos de una diversidad de posturas ideológicas; hemos tenido en el pasado fuertes desacuerdos. No obstante, hoy sabemos que no hay nada más importante que el bienestar del país y de sus habitantes.
Nos ha costado mucho trabajo aprender y llegar a acuerdos. Nos enfrentamos, además, a muchas presiones de quienes intentaron, a toda costa, que no se concretara el Frente. Trabajar juntos y hacerlo por el bienestar y la prosperidad de todos los mexicanos es posible. Mi mayor deseo de Navidad, para todos, es que cada vez más personas se unan para que hagamos de éste el mejor lugar para vivir.
¡Feliz Navidad!
Face: marcelotorresc / Tuitter: @marcelotorresc