Un senador de MORENA, bigotón y panzón, fue a tierras chihuahuenses, disfrazado de vaquero payo (guaripa baya, guayabera yucateca, pantalón guango y zapatos de burócrata fifí).
Por su outfit circense, el conglomerado de auténticos vaqueros, de él sonoramente se carcajeó.
Armando Guadiana, les dijo; “de AMLO soy embajador” y regalando lo ajeno, remató: “el agua de Coahuila pagará la deuda hídrica con los gringos” y entonces, el vaqueral, emocionado, grita… ¡Viva El Payo! y le aplaudió.
Santana entonces, se sintió negociador.